Crucero de expedición de Ponant

Un auténtica aventura ártica en Groenlandia

La majestuosa costa oriental de la gran isla helada sobrecoge al viajero en un crucero de expedición único a bordo del buque ‘Le Commandant Charcot’, que combina aventura, sostenibilidad y una buena dosis de confort francés

El buque ‘Le Commandant Charcot’, el rompehielos con el que Ponant recorre Groenlandia.

El buque ‘Le Commandant Charcot’, el rompehielos con el que Ponant recorre Groenlandia.

Albert Falcó

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El Comandante Jean-Baptiste Charcot (1867-1936) fue un médico y explorador polar francés. Hijo del célebre neurólogo Jean-Martin Charcot, heredó su espíritu aventurero y su pasión por la ciencia. Charcot fue un pionero de la exploración polar a bordo de su goleta ‘Pourquoi-pas?’, contribuyendo significativamente al conocimiento del Ártico y la Antártida.

Sus expediciones han inspirado a generaciones de exploradores y científicos, realizando importantes estudios y mediciones sobre oceanografía, meteorología y glaciología. También documentó la flora y fauna de las regiones polares. Recibió numerosos honores y reconocimientos por sus logros, incluyendo la Legión de Honor de Francia. Se le considera uno de los exploradores polares más importantes de la historia. En su honor, la compañía de cruceros de lujo francesa Ponant ha bautizado con su nombre uno de sus barcos más especiales.

‘Le Commandant Charcot’ es un buque de investigación y rompehielos, diseñado específicamente para cruceros de expedición polar. El barco, construido en 2021, destaca por su tecnología innovadora y su compromiso absoluto con la sostenibilidad ambiental, habiendo conseguido la etiqueta Bureau Veritas Cleanship, por sus bajos niveles de ruido y vibración. 

Entre sus características principales se encuentran un casco reforzado para navegar en hielo de clase polar 2, que le convierte en el único crucero del mundo con dicha característica. Posee sistemas de propulsión híbrido eléctricos a base de gas licuado y está equipado con laboratorios científicos de última generación.

Cruceros de expedición

‘Le Commandant Charcot’ realiza diversos cruceros de expedición a la Antártida y el Ártico, permitiendo a científicos de diversos campos estudiar los ecosistemas polares, el cambio climático y la historia geológica de estas regiones. Su diseño único y su enfoque en la investigación lo convierten en un referente en la exploración polar moderna.

Cuenta en plantilla con dieciséis especialistas polares entre ellos biólogos marinos, geólogos y etnólogos. Los 270 pasajeros les acompañan en sus expediciones diarias, compartiendo sus conocimientos y descubrimientos, a través de charlas y visitas a los laboratorios.

Con 150 metros de eslora y 28 de manga, cuenta con nueve cubiertas y 135 camarotes elegantemente diseñados y espaciosas suites, todos ellos con terraza exterior. Ponant es fiel a su filosofía: pequeña capacidad, decoración exquisita, ambiente único y una sutil mezcla de lujo, privacidad y bienestar. Además, la compañía nunca deja de innovar en el diseño de sus buques, abriendo nuevas rutas marítimas, nuevos destinos, reinventando el viaje responsable por mar y situando el medio ambiente, la seguridad y la protección en el corazón de su patrimonio. 

Además cuenta con una excelente gastronomía francesa a bordo, con la firma de Alain Ducasse. Su gastronomía se distingue por su amplia variedad de platos, además de excelentes vinos y productos franceses.

Rutas estivales

Durante esta temporada de verano, ‘Le Commandant Charcot’ ofrece diversos recorridos por la majestuosa costa este de Groenlandia, visitando y explorando remotos parajes muy pocas veces alcanzados por el turismo convencional.

La bahía de Scoresby Sund, también conocido como Kangertittivaq en groenlandés, es el fiordo más largo del mundo, extendiéndose por más de 350 kilómetros (220 millas) en la costa oriental de la isla. Es conocido por su impresionante tamaño, aguas profundas y paisajes naturales impresionantes, que incluyen imponentes acantilados, glaciares e icebergs. El fiordo alberga una rica biodiversidad que permite el avistamiento y estudio de especies como ballenas, focas, morsas, bueyes almizcleros y cómo no, el rey del Ártico, el oso polar.

Las imponentes montañas, los glaciares, los icebergs y la inmensidad de la banquisa polar, crean un paisaje impresionante que sobrecoge al viajero, ya sea en las salidas en zodiac o kayak, las marchas sobre la banquisa o un chapuzón polar para los más atrevidos. La visita al único asentamiento en el fiordo, Ittoqqortoormiit, ofrece una ventana a la cultura y la forma de vida groenlandesas tradicionales.

En definitiva, una experiencia polar única que permite combinar el refinamiento francés con la aventura de convertirse en un auténtico explorador del Ártico.

Más información: Un Mundo de Cruceros.