La industria del deporte

Patrocinio, en 'cash' o especies, pero dinero

Una imagen virtual del futuro Espai Barça con el nuevo Camp Nou y el nuevo Palau.

Una imagen virtual del futuro Espai Barça con el nuevo Camp Nou y el nuevo Palau. / FCBARCELONA

Marc Menchén

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El patrocinio cada vez es menos clásico, más complejo. No les voy a volver al manido discurso de que estos acuerdos ya no son meramente una transacción de dinero por visibilidad, porque esto quedó claro hace unos años y son pocos los que se han quedado anclados en ese modelo. Pero sí creo que es interesante ahondar en el trasfondo de la estrategia que el FC Barcelona está aplicando con el Espai Barça, con un plan comercial al que se están incorporando numerosas marcas y que financieramente cobra mucho sentido. El intercambio en especies a cambio de apoyo en el reconocimiento de marca y certificación de la calidad de los productos.

Los términos económicos de ninguno de esos acuerdos son públicos, pero en todas las comunicaciones se deja claro que las compañías tendrán un papel activo en la entrega de soluciones para el futuro Spotify Camp Nou. Son empresas que probablemente no habrían firmado con el Barça a través de alguno de los paquetes de patrocinio habituales, pero a las que sí parece compensar el hecho de entregar parcialmente gratis su producto a cambio de poder vincular su imagen a la del club blaugrana y utilizar sus instalaciones como showroom de sus soluciones.

La ventaja para la entidad que preside Joan Laporta es doble. Por un lado, no canibaliza activos de patrocinio asociados al primer equipo de fútbol y ha desarrollado todo un nuevo inventario de la mano de IPG 360, al tiempo que en el corto plazo va a poder reducir la salida de caja para abonar el coste real que tendrían todos los servicios de estos nuevos patrocinadores. 

Canal de ventas adicional

Fortinet y Hewlett Packard Enterprise figuran como socios oficiales del estadio con sus sistemas de ciberseguridad y analítica y experiencia del fan, respectivamente. Por su parte, Eheim Möbel y Figueras Seating proveerán los asientos de grada general y zonas VIP, mientras que TK Elevator instalará ascensores y escaleras mecánicas e Iluminación Disano incorporará tecnología LED y un control inteligente para la luz. 

Hablamos de varios millones de euros de inversión, que con esta fórmula exigirán un menor esfuerzo económico por parte del Barça. En cierto modo, me recuerda al concepto de founding partners, muy extendido en Norteamérica cuando una nueva franquicia o recinto deportivo arranca su fase de construcción. El reto, a largo plazo, será mantenerlos involucrados cuando el intercambio no sea necesario y haya que pedir cash. Y ahí sí será vital que el club demuestre que el Spotify Camp Nou puede ser un canal de ventas adicional para todos ellos.

Un hólding que salva la plaza de otro

El fútbol europeo lleva meses debatiendo el futuro de los grupos multiclub, y la realidad es que su impacto va a ser fuerte. Y probablemente acabe favoreciendo una mayor harmonización de regulaciones y una mayor cooperación y conocimiento entre unas ligas y otras. Un ejemplo claro se ha dado esta semana en Francia. El Girondins de Burdeos se ha visto abocado a la liquidación por no hacer frente a sus deudas y la imposibilidad de convencer al dueño del Liverpool FC sobre su potencial recuperación futura. 

Un desastre para un histórico del fútbol galo -¿una oportunidad pérdida para Fenway Sports?- que salva la papeleta de otro holding. El City Football Group convivía este verano con el éxito de escalar al Girona FC a Champions League con el fracaso de ver cómo el ESTAC Troyes se caía del fútbol profesional. Sin embargo, el conjunto que compró a Savinho para cedérselo al Girona y ahora vendérselo al Manchester City finalmente podrá seguir en la Ligue 2. Salvados por la campana, y por la cruda realidad de un fútbol, el francés, que debe preparase para un duro invierno. Un campeonato encajado en el Big 5 que va camino de ser una liga satélite del resto.