El profundo ‘agujero’ de Flick en el centro del campo del Barça

Anda pidiendo “un seis” que tenga conceptos defensivos y le sirva como ancla y sostén para coser a su Barça. Anda pidiendo Hansi Flick un medio centro que herede el oficio y la sabiduría que dejó Sergio Busquets cuando se marchó al Inter Miami para reunirse con Messi, Suárez y Jordi Alba. Eso sucedió hace ahora un año y no se ha encontrado aún remedio.

Anda el nuevo entrenador azulgrana preocupado porque no le llegan refuerzos, el tiempo corre en su contra -en 26 días debuta en la Liga en Mestalla ante el Valencia- y, sobre todo, porque tiene un profundo agujero en el centro del campo, castigado por las lesiones.

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"Para mí también es importante que tengamos un centrocampista defensivo, que también se preocupe a no conceder espacios al oponente", ha reconocido Flick explicando que le falta esa pieza esencial en su estructura.

En el centro del campo solo le quedan dos jugadores sanos (Oriol Romeu y Gündogan, aún de vacaciones tras la Eurocopa con Alemania) de los siete que disponía Xavi la pasada temporada. El panorama es desolador para Flick, quien tiene también estas semanas en la ciudad deportiva a Pablo Torre, el mediocampista que jugó la pasada temporada cedido en el Girona.

Oriol Romeu, el único medio centro

32 años. Jugó 28 partidos de Liga, 11 de titular. 0 goles, 1 asistencia. El único medio centro real que tiene en la plantilla. Estaba más fuera que dentro tras una primera temporada irregular en la que terminó siendo suplente habitual. Tuvo un buen inicio, pero el exjugador del Girona se desfiguró a los pocos meses, atormentado, además, por un problema en la rodilla que no le dejó sacar su mejor rendimiento. Se planteaba este verano su salida del Barça, consciente de que no estaba en su mejor momento. De momento, continúa.

Gündogan todavía resiste

33 años. Jugó 36 partidos de Liga, 33 de titular. 5 goles, 9 asistencias. Faro del juego ofensivo para Xavi, tanto en la creación como situado a la espalda de Lewandowski. Pieza que dota de estilo al equipo, conocedor de los métodos de Flick porque han compartido vestuario en la selección alemana. Gündogan ha sido tentado, según ha informado TV-3, por una atractiva oferta económica para irse a Catar.

Al Barça llegó libre el pasado verano, pero con salario de megaestrella, algo que el City ya no estaba dispuesto a darle, y ahora su posible venta dejaría todo como beneficio puro. Pero el problema sería para el nuevo técnico azulgrana porque perdería a uno de sus pilares en el centro del campo, el más resistente. El único que no se perdió en esa zona un partido por lesión la pasada temporada.

Sergi Roberto, un capitán sin equipo

32 años. Jugó 14 partidos de Liga, 10 de titular. 3 goles, 2 asistencias. Está en el mercado el capitán del Barça. Y está libre. No tiene equipo. Acabó su contrato con el club azulgrana el pasado 30 de junio. Desde entonces, ni rastro de él, aguardando una oferta que le seduzca, sea en la Premier o en la Liga española.Trabaja en solitario, con un preparador físico, esquivando las cámaras, mientras sus agentes le negocian un nuevo destino.

El Barça lo quiso renovar, aunque con una condición. ¿Cual? Que esperara a hasta la primera quincena de agosto, una vez hubiera ajustado el fair play salarial, con el riesgo que eso implica. Si llegado ese momento, y ya a punto de empezar la Liga u otras grandes competiciones, no tiene cerrado el objetivo la junta de Laporta, ¿qué pasa con Sergi Roberto?

Pedri, de nuevo en la enfermería

21 años. Jugó 24 partidos de Liga, 16 de titular. 4 goles, 2 asistencias. Caía lesionado en la Eurocopa cuando recibía una dura entrada de Toni Kroos. Justo en el momento en que empezaba a recuperar su mejor nivel. Y, otra vez, está el canario recluido en la enfermería, teniendo que utilizar sus vacaciones para recuperarse del esguince del ligamento lateral interno de la rodilla izquierda que le impedirá empezar con garantías el proyecto Flick.

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Los médicos del Barça no han querido dar plazos, pero el inicio de la Liga es una utopía para el centrocampista, quien irrumpió a lo grande en la elite, transformado hace tres años en el mejor jugador joven de Europa. Pero ahora, y con tanta lesión muscular, no tiene la continuidad necesaria para asentarse en el equipo. Xavi no dejaba de añorarle. Y Flick tan solo lo ha conocido fuera del campo, compartiendo, por ejemplo, fotos simbólicas en las obras de construcción del nuevo Camp Nou.

Gavi, añoranza sin fin

19 años. Jugó 12 partidos de Liga, 10 de titular. 1 gol, 1 asistencia. No juega desde noviembre pasado. Y, tal vez, no vuelva hasta el próximo noviembre. Su ausencia tuvo un efecto devastador sobre el Barça de Xavi, despojado de un jugador que trasciende más allá de su fútbol.

Aquella grave lesión de rodilla privó al técnico de Terrassa de una pieza indispensable para cohesionar a su equipo, tanto en el plano táctico como emocional. Él, además, se ha perdido el éxito en el campo de la selección española, donde era intocable, pero no fuera transformado "en el jugador 27". Un campeón más de la Eurocopa.

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Gavi, además, encaja de maravilla en el plan que tiene en la cabeza Flick para reactivar el centro del campo azulgrana. ¿Por qué? Porque es jugador de toque, anclado en el estilo del club, y también de vértigo, como pretende el alemán. Generoso en el esfuerzo físico y con más gol del que se le intuye. Pero el técnico tampoco lo tendrá en el arranque de su Barça.

De Jong, el tobillo maldito

27 años. Jugó 29 partidos de Liga, 20 de titular. 2 goles, 0 asistencias. Desde abril pasado, cuando su tobillo derecho se quebraba por tercera vez en una misma temporada, no se le ha vuelto a ver. Y en el camino se ha perdido la Eurocopa con los Países Bajos de Koeman que alcanzaron la frontera de la semifinal.

No se sabe, además, tampoco cuándo volverá Frenkie de Jong, quien debía ser elemento referencial en el Barça de Flick, acostumbrado como estaba en el Ajax a moverse en la misma idea táctica que ha usado el alemán, tanto en el Bayern como en la selección.

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Pero ese tobillo no acaba de recuperarse porque un esguince se ha ido reproduciendo, por un motivo u otro, durante el curso pasado. No hay plazo fijado para la vuelta del centrocampista neerlandés, quien desea, por ahora, esquivar la visita al quirófano. Mantiene, por lo tanto, un tratamiento conservador a la espera de que disminuya la inflamación y pueda volver a calzarse las botas.

Fermín, sin tregua (Eurocopa y JJOO)

21 años. Jugó 31 partidos de Liga, 14 de titular. 8 goles, 0 asistencias. El andaluz es uno de los legados que deja Xavi en el vestuario. Vio el técnico en Fermín detalles que no se percibían, provocando una explosión espectacular -es el centrocampista con más gol del Barça- añadiendo, al mismo tiempo, registros nuevos al equipo como esa hiperactividad y llegada al área en segunda línea.

Tal fue su descomunal aparición en la elite que España lo ha convertido en uno de los pocos jóvenes que doblan en un verano sin tregua: primero Eurocopa, con presencia mínima -suplente todo el torneo y solo jugó 28 minutos ante Albania- y ahora Juegos Olímpicos de París donde sí es pieza estructural para Santi Denia.

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Esa doble llamada de la selección deja a Flick sin un futbolista valioso, al que no verá todo el verano, obligado, además, a darle las vacaciones que no ha tenido desde que en julio de 2023 soltara un imponente zurdazo en Estados Unidos para ganar al Madrid. Esa fue su singular y sólida manera de anunciar su calidad. Desde entonces, todo un descubrimiento. Pero Flick ni le conoce aún.