GIRONA-MONTPELLIER (3-3)

El Girona también empata en el segundo amistoso ante el Montpellier

El Girona inició la pretemporada con un empate en Olot (1-1)

Iván Martín felicita a Dovbyk tras marcar este el primero de sus dos goles al Montpellier.

Iván Martín felicita a Dovbyk tras marcar este el primero de sus dos goles al Montpellier. / @GironaFC

Marcos López

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Dos partidos, dos empates. El Girona no conoce aún la victoria en esta pretemporada. Igualó en su estreno veraniego ante el Olot (1-1) y también acabó el segundo duelo, ya en la Vall d’en Bas, con otro marcador equilibrado: 3-3 ante el Montpellier.

Míchel ya empezó a descubrir a uno de sus nuevos fichajes en el campo tras unos días de entrenamiento. Salió Krejci, el central checo, en un once integrado por Gazzaniga, Arnau, David López, Antal, Valery, Almena, Ilyas, Iván Martín, Pau Víctor y Dovbyk, quien se estrebaba como titular este verano con el ruido sobre su futuro aún muy abierto. Quiere fichar el Atlético al delantero ucraniano, actual Pichichi de la Liga, pero no hay acuerdo con el Girona.

45 minutos de Dovbyk, 2 goles

Se adelantó el Montpellier nada más iniciarse el partido con el gol de Nordin (0-1, m. 18). Pero pronto encontró la réplica del Girona con el primer tanto anotado por Dovbyk (1-1, m. 22). Un gol de puro nueve colocando con dulzura su pie izquierdo para batir al meta del equipo francés.

De nuevo, Dovbyk ajustó su mirilla para firmar su segundo tanto: 2-1, m. 48. Aprovechó su control, de nuevo, con la pierna izquierda y su gran carrocería corporal para conquistar el espacio antes de su ajustado disparo.

Con ese marcador, 2-1, se llegó al descanso, lo que provocó la intervención de Míchel, el técnico del Girona, quien ordenó tres cambios: Juanpe por David López, Toni Villa por Pau Víctor y Stuani por Dovbyk. Luego, el carrusel de sustituciones fue aún mayor: Comas por Krejci, Selvi por Arnau, Minsu por Ilyas y Manu Vallejo por Valery. Empató el Montpellier gracias al penalti marcado por Khazri (2-2, m. 70). 

Y expiraba ya el encuentro cuando Manu Vallejo firmó un maravilloso gol (3-2, m. 81), que parecía darle el triunfo al Girona. La jugada fue soberbia gracias a la invención previa de Iker Almena que llevaba al equipo de Míchel al triunfo. O eso parecía porque, otra vez, Khazri (3-3, m. 83) selló el empate final.