La lesión de Frenkie de Jong enturbia aún más su futuro en el Barça

Malos tiempos para Frenkie de Jong, jugador llamado a ser referencial y estructura en el Barça desde hace más de un lustro. Llegó en 2019 con Josep Maria Bartomeu desembolsando una fortuna por él al invertir 85 millones de euros en su fichaje. Pero nunca ha terminado de ser lo que se esperaba de él.

Malos tiempos, además, porque el tobillo derecho le ha enviado esta temporada más tiempo que nunca a la enfermería (se ha perdido 20 partidos por lesión) y le hace, además, quedarse sin Eurocopa, enturbiando todavía más su futuro en el club. 

Koeman acusa al Barça

No juega en el Barça desde abril, tras encadenar tres lesiones en ese tobillo en los siete últimos meses) ni tampoco con su selección. Y eso que Ronald Koeman, el extécnico azulgrana y actual seleccionador neerlandés, le esperó hasta el último momento.

Una espera en vano, aunque De Jong estaba dispuesto a arriesgar al considera que esa lesión no era crónica. Los médicos de la federación holandesa, tras someterle a diversas pruebas el pasado domingo y lunes, frenaron su retorno y firmaron su descarte definitivo. 

"Estoy triste, pero mi tobillo necesita más tiempo”, comentó decepcionado el jugador, de 27 años, que tiene contrato hasta 2026. "Tenía antecedentes con esta lesión en el tobillo y no conviene arriesgar. Su club si arriesgó antes y ahora hay que pagar el precio”, acusó Koeman, dolido porque el Barça no administró con tacto esa dañada articulación del futbolista.

El jugador más caro de la plantilla

Una lesión que no solo le deja sin Eurocopa sino que complica, al mismo tiempo, todavía más el panorama en torno a su futuro. Es De Jong parte de lo que Laporta siempre ha considerado "venenosa herencia" bartomeuista.

No solo por lo que costó (es, por ejemplo, el jugador más caro de la actual plantilla por encima de los 56 millones por Raphinha, 55 de Ferran Torres, 50 por Koundé o 45 por Lewandowski) sino porque su salario prepandémico está muy por encima de las posibilidades actuales del club.

Llegó en 2019 y costó 85 millones, muy por encima de los fichajes luego de Laporta: Raphinha (56), Ferran Torres (55), Koundé (50) y Lewandowski (45)

De ahi, que el Barça intentara nada más llegar Laporta a la presidencia (marzo 2021), la salida del centrocampista neerlandés. Lo intentó por todos los medios a su disposición, pero no se salió con la suya ya que el futbolista no se quiso mover. La oferta del Manchester United de Ten Hag, su exentrenador en el Ajax, era el escenario perfecto para liberar al Barça de un problema y reunirlo con Casemiro en Old Trafford.

Pero Frenkie no se quiso ir entonces. Ahora, con esta lesión en el tobillo derecho, todo se complica, mientras el club se asoma a un marco más complejo. Le planteó hace meses una oferta de renovación a la baja. Nada se supo entonces de la respuesta del futbolista, a quien le quedan dos años de contrato, territorio peligroso para el Barça porque si deja pasar el tiempo será él el único dueño de su futuro. 

Tres lesiones en el mismo tobillo: septiembre, marzo y abril

Y el tobillo, además, no mejora. Desde aquel 23 de septiembre pasado en que Jonathan Bamba, el jugador del Celta, se le caía encima de su pie derecho todo ha ido de mal en peor. Aguantó un poco sobre el césped de Montjuïc, pero fue sustituido (m. 36). Estuvo luego dos meses de baja por “ una lesión de la sindesmosis tibioperoneal distal del tobillo derecho". Volvió y se volvió a lesionar. En el mismo tobillo, claro.

Ocurrió el segundo percance en San Mamés en el duelo con el Athletic (3 de marzo) cuando peleaba un balón aéreo con Unai Gómez. A la caída de ese salto, el tobillo cedió. Apenas jugó 26 minutos. Salió en camilla sin poder ni apoyar el pie derecho. Así volvió a la enfermería. Y en el Bernabéu (21 abril) porfió por una pelota con Valverde, el jugador del Madrid, y acabó, otra vez, en la camilla, destrozado física y emocionalmente. Desde entonces no ha vuelto a jugar De Jong.

Esas imágenes en camilla abandonando el Bernabéu son las últimas que se han visto del centrocampista en el campo, retrato de su peor año en el Barça. En su quinta temporada como azulgrana ha estado más tiempo de baja que en las cuatro anteriores. Y todo por culpa de ese tobillo, con el que ha decidido seguir tratamiento conservador, esquivando, en todo momento, la visita al quirófano.