DE NIÑOS A CAMPEONES DEL MUNDO

El día que Bagnaia le pidió a Márquez que se hicieran juntos una foto de recuerdo

Aquí está la foto. Un 'Pecco' Bagnaia, niño, silencioso (casi como ahora, ya bicampeón) y un sonriente y pícaro Marc Márquez, cuatro años más grande que el actual líder de Ducati. Quince años después, formarán el equipo más atómico del Mundial-2025 de MotoGP.

'Pecco' Bagnaia, con 13 años, y Marc Márquez, con 17, en Montmeló, en 2010.

'Pecco' Bagnaia, con 13 años, y Marc Márquez, con 17, en Montmeló, en 2010. / MONLAU COMPETICIÓN

Emilio Pérez de Rozas

Emilio Pérez de Rozas

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Fue un día de la primavera del 2010. Los equipos (de niños, o casi) de la escuela Monlau, liderada por dos monstruos como Iván Ventura y Jaime Serrano, que tanto, tanto, han hecho (y siguen haciendo) por el motociclismo catalán, por la cantera inagotable de talentos, realizaban unos entrenamientos, ni siquiera se lo podía llamar test, o sí, con sus tres ‘pilotitos’ atómicos o que iban a ser atómicos.

Allí estaban, casi con cero años, es decir, muy niños, Alex Rins, Alex Márquez y un italianito llamado ‘Pecco’ Bagnaia, de 13 años, que Iván y Jaime había acogido en su cuna de campeones porque un buen amigo suyo, el italiano Umberto Milesi, propietario de los frenos Galfer, les había llamado un día y les había dicho, así, tal cual, “tengo un sobrinito, que se llama Francesco, pero al que todos llamamos ‘Pecco’, que tiene muy buena pinta y que deberíais acoger en vuestro equipo, pues aquí, en Italia, no hay competiciones de niños tan pequeños”.

Y apareció Marc

Ivan y Jaime, que entonces parecían una ONG (ahora ya no tanto, pues todo se ha profesionalizado muchísimo), no tardaron ni 20 segundos en decirle a Umberto que cogiese a su sobrinito y se presentase en Barcelona. Y allí estaba ‘Pecco’, junto a Rins y el pequeño de los Márquez, junto a sus tres Moriwaki de PreMoto3, con motor de motocross, de cuatro tiempos, de Honda, esperando que empezasen las tandas.

“Y, recuerdo perfectamente”, explica Serrano, “que, en ese instante, llegó a nuestro boxe Marc, que entonces ya estaba en el Mundial de 125cc, en el equipo de Aki Ajo, con el que, pocos meses después, ganaría su primer mundial, para saludar a Alex y animarle, pues él siempre estaba pendiente de su hermano, siempre”. Marc tenía entonces 17 años y Bagnaia, apenas 13. “Y, antes de abandonar el boxe, ‘Pecco’, bueno, y todos los demás, le pidieron a Marc hacerse una foto y Marc, por descontado, accedió encantado”.

'Pecco' Bagnaia, con 14 años, en el 2011, en el Campeonato de España de Velocidad.

'Pecco' Bagnaia, con 14 años, en el 2011, en el Campeonato de España de Velocidad. / MONLAU COMPETICIÓN

Ventura cuenta que “ya entonces, ‘Pecco’ era un niño, un muchachito, tremendamente formal, serio, poco hablar, muy, muy correcto, que trataba de encajar, con mucho tacto, en el equipo que lo había acogido y en el que se encontraba muy a gusto, la verdad”. Al año, siguiente, en el CEV de 125cc, ganó Rins, seguido de Alex Márquez y de Bagnaia. Y, en el 2012, venció Alex Márquez y ‘Pecco’ fue tercero.

Quine años después, es decir, la próxima temporada, el mayor de los Márquez será el compañero de escudería, de taller, de boxe del (de momento) bicampeón del mundo de MotoGP. Así es la vida, aquel niño que le pidió hacerse una foto de recuerdo a MM93 es, ahora, el mandamás del ‘team’ en el que el ocho veces campeón del mundo tratará de pelear, si no lo logra ya este año, por su noveno título mundial, teniendo como compañero de taller y primer rival al niño de la foto.

“No he influido en la elección de mi compañero de equipo del año que viene, aunque me gustaría que el piloto que venga no arruine el buen ambiente que tenemos en el boxe”

Francesco 'Pecco' Bagnaia

— Bicampeón del mundo de MotoGP con Ducati Corse

“El ambiente en el boxe de Ducati no tiene por qué cambiar”, ha señalado Márquez. “El pulso será en la pista, que es donde hay que demostrar ser mejor que los demás, pero en el boxe puede reinar la armonía sin problemas, aunque es evidente que todos somos egoístas y buscamos lo mejor para tratar de conseguir ganar carreras, que es el objetivo de todos los pilotos que estamos en el Mundial”.

Es cierto que Bagnaia ha estado afirmando, durante los últimos meses, mientras Ducati ha estado dudan entre Jorge Martín y Marc Márquez a la hora de escoger, que no opinaba sobre quien debía ser su compañero de boxe “aunque me gustaría que el piloto que venga no arruine el buen ambiente que tenemos en el boxe”. Una cosa está clara: Márquez ha sido escogido por el gurú de Ducati, el ingeniero Gigi Dall’Igna. “Si no fuese por Gigi, yo no hubiese acabado en el equipo oficial de Ducati”, confesó MM93 en la SER, el pasado miércoles.

Marc Márquez, en el podio de Misano, en sus inicios en el Mundial.

Marc Márquez, en el podio de Misano, en sus inicios en el Mundial. / MIRCO LAZZARI

Es evidente que Bagnaia sabe que, a partir de la próxima temporada, su compañero de escudería sí le discutirá el título, las carreras y el liderato en el seno del departamento de competición de la firma de Borgo Panigale.

Es evidente que aquel niño que le pidió hacerse una foto como recuerdo a Marc Márquez sabe que, probablemente, el ocho (o nueve) veces campeón del mundo tendrá, a partir de ahora mismo, una incidencia importantísimo en el diseño de la futura Ducati, que, probablemente, se fabricará más a gusto de Márquez que de Bagnaia. Ese sí es el auténtico temer de ‘Pecco’, cuyo estilo fino y sin exageraciones podría dejar de ser el adecuado para una ‘Desmosedici’ más rockera y que se pilote forzando el tren delantero en la entrada en curva, como le gusta a Marc.

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