La selección de Brasil se 'rebela' contra el régimen islamista de Irán

Las futbolistas brasileñas, que jugarán el próximo Mundial femenino, viajaron a Australia en un avión que reivindica los símbolos de las protestas contra el República Islámica de Irán

Una mujer protesta frente a un cartel de Masha Amini.

Una mujer protesta frente a un cartel de Masha Amini. / AFP

El Periódico

El Periódico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La selección brasileña femenina de fútbol, que será una de las participantes en el próximo Mundial de Australia y Nueva Zelanda, llegó la pasada madrugada a Brisbane con ánimo reivindicativo. El combinado entrenado por Pia Sundhage viajó en un avión con el que pretendió protestar contra el régimen de la República Islámica de Ali Jamanei y Ebrahim Raisi.

En el aparato que trasladó a las brasileñas a la cita mundialista estaba dibujado el mensaje: "Ninguna mujer debería ser forzada a cubrir su cabeza". Además, estaba grabada la imagen de Mahsa Amini, símbolo de las protestas en Irán después de su muerte bajo custodia policial tras ser detenida en Teherán por llevar mal puesto el velo. Y también la de Amir Nasr Azadani, futbolista condenado a 26 años de prisión por, supuestamente, haber atentado contra funcionarios de seguridad durante las protestas llevadas a cabo a finales de 2022.

Según la ONG Iran Human Rights, en 2022 se produjo el mayor aumento de ejecuciones desde 2015. Hasta 582 personas fueron ejecutadas, con un incremento del 7% respecto a 2021. Según dicha organización humanitaria, 194 mujeres han sido ejecutadas desde 2010 (siete este mismo año).

Durante el pasado Mundial masculino disputado en Qatar, donde la selección de Irán masculina quedó eliminada en la primera fase, los futbolistas se negaron a cantar el himno nacional en el partido de debut frente a Inglaterra. Fue su manera de apoyar las sangrientas protestas que se estaban llevando a cabo en su país, pese a que las organizaciones humanitarias consideraron que aquella representación no fue suficiente.

La selección femenina de Irán nunca ha logrado disputar un Mundial desde el primero organizado en China en 1991.