El Espanyol se defiende con un ataque tras la invasión del RCDE Stadium en el derbi

El RCD Espanyol ha roto el silencio institucional tras la invasión del RCDE Stadium por parte de su afición mientras del Barça celebraba el título de liga. "Reiteramos sin excusas, nuestra condena a los hechos aislados sucedidos al final del encuentro. Estamos colaborando, como siempre hemos hecho, con los organismos competentes y las fuerzas de seguridad para la depuración de responsabilidades de lo sucedido", relata el comunicado. "El RCD Espanyol no solo habla, también actúa. Esperamos que quienes en estos días aleccionan y pontifican, hagan lo propio en su ámbito de actuación cuando les corresponda", añaden.

"Queremos también hacer una llamada al sentido común y a la proporcionalidad. En estos días hemos asistido a un ataque desmedido y generalizado, especialmente en nuestra tierra, tanto a nuestro Club como a nuestra afición. No podemos decir que nos sorprenda porque, lamentablemente, estamos acostumbrados a sufrir la aplicación de diferentes prismas de análisis, en función de quiénes los protagonizamos. No obstante, como institución entendemos que en algunos casos se han cruzado líneas de respeto, presunción de inocencia y ataques generalizados a nuestra afición que han derivado en situaciones de acoso social en múltiples ámbitos", denuncian.

Los Mossos ven "casi imposible" evitar una invasión como la del campo del Espanyol

En el comunicado, el club blanquiazul se posiciona como víctima tras los hechos acontecidos en su estadio y avisa que tomará acciones legales contra "aquellos que han calumniado, amenazado o vejado a nuestro Club y/o a toda nuestra afición".

"Sin que ello constituya excusa o eximente de nuestra condena y responsabilidad en los hechos acontecidos, debemos ser igual de firmes en la denuncia de un intento de criminalización de una entidad de más de 122 años de historia que cuenta con una afición ejemplar y eminentemente familiar, que está sometida al escrutinio de una doble vara de medir moral; implacable con el humilde y laxa con el poderoso", en lo que puede entenderse como una alusión directa al Barcelona.