El sustituto de Emery

Setién, nuevo técnico del Villarreal: de los 1.005 pases del Camp Nou al 2-8 de Lisboa

El preparador cántabro, de 64 años, no entrenaba desde su etapa de siete meses en el Barça, coronada en agosto de 2020 con la humillación ante el Bayern.

Quique Setién, en una entrevista con El Periódico.

Quique Setién, en una entrevista con El Periódico. / Jordi Cotrina

Raúl Paniagua

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Parecía ya retirado junto a sus vacas en el pueblecito costero de Liencres (Cantabria). De hecho había llegado a afirmar que ya no le motivaba dirigir a ningún equipo, que solo regresaría a los banquillos para entrenar a los niños. Pero Quique Setién, de 64 años, afrontará una nueva aventura en la élite al frente del Villarreal, que le escogió como recambio hasta final de temporada de Unai Emery, quien se fugó al Aston de Villa

Como ocurrió en su llegada al Barça, Setién no fue la primera opción del submarino amarillo. La cúpula de los Roig prefería a Pochettino, pero el argentino desea empezar de cero en un proyecto sugerente. También se habló de Marcelino, que no tuvo una buena salida de Vila-real y aspira a suceder a Luis Enrique en la selección. Con Setién la negociación fue fluida desde el inicio y su fichaje se anunció este martes. Dirigirá su primer entrenamiento el miércoles por la mañana y después será presentado. Firma para lo que resta de temporada y una más.

Su estreno en la Liga será este domingo en Bilbao ante el Athletic de Valverde, al que suplió en el club azulgrana

El preparador cántabro no entrenaba desde su convulsa salida del Barça, al que dirigió 25 partidos: 19 de Liga, 3 de Copa y 3 de Champions, el último de ellos de infausto recuerdo. Aquel 2-8 ante el Bayern en Lisboa supuso el final de Setién, que ya había sumado otras decepciones, como la eliminación en la Copa contra el Athletic o la derrota en el clásico ante el Madrid, que acabó llevándose la Liga con una racha espectacular tras el parón por la pandemia. 

Récords de posesión

El veterano técnico estuvo siete meses en el Barça. Llegó el 13 de enero de 2020 tras el injusto despido de Ernesto Valverde, que había ganado dos Ligas y también comandaba el campeonato en su adiós. La eliminación en la Supercopa ante el Atlético llevó al presidente Josep Maria Bartomeu a tomar la decisión. Su figura ya estaba desgastada por las debacles europeas ante la Roma y el Liverpool, pero el equipo al menos alcazaba las rondas finales. Ahora ni eso. 

Setién, junto a Messi, en un partido del Barça.

Setién, junto a Messi, en un partido del Barça. / EP

Llegó Setién y los apasionados del toque se emocionaron con su debut en el Camp Nou ante el Granada, sellado con 1.005 pases (solo 203 hacia adelante) y un 82,5% de posesión, récord de esa temporada en la Liga, registro que también había logrado el curso anterior con el Betis. El Barça ganó con un gol de Messi en el minuto 76, cuando el rival ya estaba con 10. 

Llevó al club a los tribunales porque Bartomeu se negó a pagarle el finiquito de 4 millones, que acabó cobrando tras un acuerdo con Laporta

El 'shock' del vestuario

Más de 65.000 espectadores asistieron a ese estreno del técnico, que cumplía un sueño dirigiendo al club al que siempre había admirado. Su periplo por el Barça fue de más a menos. Lejos del poderío y la frescura que mostraba el equipo a las órdenes de su admirado Guardiola, el Barça de Setién aburría y tropezaba. Tampoco ayudó su mala relación con los jugadores, molestos con su metodología y la de Eder Sarabia, actual técnico del Andorra.

«Nunca he vivido un vestuario así, ni en la selección ni en el Atlético. Me provocó un shock», dijo tras su convulsa salida. Su querido Messi se convirtió en un «muchacho difícil de gestionar» y acabó llevando al club a los tribunales. Bartomeu se negó a pagarle un finiquito de cuatro millones que finalmente recibió tras un acuerdo cerrado con Laporta a finales del pasado año. El Villarreal juega este jueves en la Conference y el domingo se medirá en San Mamés con el Athletic de Valverde.