Manel Ramos: «Buscamos que el cuerpo se sienta más libre»

Va y viene Manel Ramos a Holanda a menudo. Reclamado por Cruyff, en el Ajax andan encantados desde hace un tiempo con la figura de un osteópata -«es un profesional sanitario», recalca- que trabaja «más en la prevención de las lesiones que en la recuperación». Va a Ámsterdam una vez al mes, como mínimo,   a examinar las joyas de la corona del Ajax, los talentos aún ocultos, obsesionado en que no se estropeen antes de llegar a la élite.

-¿Cuál es su trabajo?

-Lo más importante es que tenemos que intentar prevenir las lesiones. Sabemos que el riesgo cero de lesión es utópico. Pero mi trabajo es, sobre todo, la prevención. Por eso, hacemos un examen osteopático previo, con tres pruebas. Primero, un examen postural, luego un examen morfoestático y, finalmente, un examen osteodinámico. Así tenemos la fotografía auténtica del organismo del individuo.

-Y, luego, ¿qué?

-A partir de ese momento buscamos las compensaciones de cada individuo y, por supuesto, encajado en las condiciones peculiares de cada deporte. Eso, aunque sea el más mínimo detalle, influye en el gesto deportivo. Y hablamos de que milésimas de segundo pueden ser decisivas para, por ejemplo, llegar antes a un balón. O no. Trabajamos, y ahora más que nunca, en que el grado de lesión sea menor o el tiempo de recuperación sea más corto del habitual.

 -¿Cómo lo ve el deportista?

-Figuras como el podólogo, el nutricionista o el osteópata, que antes apenas tenían peso, adquieren cada vez más trascendencia. No se nos ve, no tenemos que salir en la foto, pero para ellos es muy importante porque hacemos cambios importantes en el funcionamiento del organismo. ¿Cuáles? Sobre todo, a nivel mecánico de la columna, con ajustes directos.

-¿Qué sienten ellos?

-Buscamos que el cuerpo esté más libre. Yo les pregunto: «¿Cómo te notas?» Y ellos me dicen. «Más libre, me siento con más libertad». Lo que hacemos es generar movilidad donde no la hay, busco vértebras que no se mueven o corregimos juegos articulares que no se mueven correctamente. Si les das dos o tres grados de movilidad, para ellos es mucho y cuidamos esas sobrecargas a las que están expuestos. En el baloncesto, Jordan, por ejemplo, ya hablaba de la importancia del osteópata. Johan, cuando era entrenador, también recurría a un especialista holandés. Buscamos todos los aspectos de la lesión. A veces, un problema visceral te puede generar un problema mecánico. O al revés.