Alexia y Pajor sentencian el Gamper para el Barça (2-0)

Este es un Barça contento. Pese a los cambios, probaturas y circunstancias, el conjunto azulgrana se impuso al AC Milan (2-0) en el Gamper para dar el pistoletazo de salida a la temporada. El desparpajo de Ewa Pajor y la magia de Alexia Putellas sellaron el triunfo para las azulgranas. Pere Romeu arranca su era con el título culé ante una afición entregada que batió un nuevo récord.

El Gamper siempre es un día de reencuentros y primeras veces. De las jugadoras con la afición y de las nuevas incorporaciones con la que será su nuevo hogar. El torneo culé también es la cita de los discursos que dan inicio a la temporada. La capitana Alexia Putellas y el nuevo director de orquesta de este Barça, Pere Romeu, coincidieron en el punto clave: aquí han venido a ganar. "Preparaos, que esta temporada vamos a por muchos éxitos y este equipo os hará sentir orgullosos", decía el técnico, a la vez que reconocía la determinación del club por mantener la apuesta por el femenino.

"Es una alegría gigante para mí volver a estar aquí con vosotras y ser la capitana del mejor equipo del mundo", aseguraba Alexia. "Quiero empezar agradeciendo a la afición por el apoyo de todos estos años. Sabemos el esfuerzo que hacéis, la energía que nos transmitís, cómo os desplazáis para vernos. No sabéis la energía que nos hacéis llegar. Cada temporada es una nueva oportunidad para volver a hacerlo. Sabemos lo que es llevar este escudo. Es esfuerzo, exigencia y es lo que haremos cada día para volver a ganar estos cuatro títulos. Esto es lo que es este equipo. Vamos a por todas y sabemos que esto requiere esfuerzo diario y os necesitamos allí donde vayamos y por supuesto en casa", remataba con el brazalete en el brazo.

Pajor, letal

El partido arrancó sobre el guión habitual. Dominio culé ante un Milan que intentaba resistirse a la perspicacia de Ewa Pajor. Está llamada a ser única. Ha llegado al Barça para saciar la sed de las azulgranas, huérfanas de una delantera centro pura desde que se marchó Jenni Hermoso hace ya un par de temporadas. El Barça de Pere Romeu necesitaba gol, ese desequilibro que te da una futbolista que un instinto letal. Siempre de cara a portería, con ansia y hambre de devorar a las centrales. Siempre colándose donde no debe, reclamando su espacio. Pajor se presentó en el Johan Cruyff a su nueva afición, que ya vibra con sus goles.

Ese carácter calmado, discreto más bien, aunque siempre con una sonrisa de medio lado en la cara. Esa que llevas cuando sabes que te vas a salir con la tuya. Pajor fue la primera en saltar al césped en el día de su estreno. Fue un par de horas antes del partido, totalmente sola y vestida de calle. Fue directa al punto de penalti de la portería del gol norte. Tras un par de zancadas, lo pisó y emprendió la marcha hacia el lado contrario. Estaba sola, inmersa en su mundo, preparándose para los que iba a hacer. Con la misma determinación que cumplió su superstición, se plantó ya de azulgrana en el campo para firmar el primer tanto culé en el Johan Cruyff.

Graham Hansen le puso un balón precioso, desde más allá de la esquina del área y con un toque delicado que dibujó una parábola hasta la testa de la delantera. Con contundencia la envió al fondo de la red. Entró y Pajor sonrió. De medio lado, con brillo pícaro en los ojos, mientras señalaba a su compinche. La dupla Hansen-Pajor augura diversión.

Si este Barça sigue el ritmo de los nuevos fichajes, también es gracias a las de siempre. Alexia Putellas afronta esta temporada de nuevo en su mejor versión. Es la capitana, no solo por llevar el brazalete, sino por comandar a todo un club y una afición que cree a fe ciega en la de Mollet del Vallés. No hay proyecto sin ella. La '11' salió desde el banquillo a pocos minutos para el final, pero con su magia poco necesita para levantar a todo el mundo de sus asientos. Con una vaselina desde casi el centro del campo supero a la guardameta italiana haciendo enloquecer a todos los presentes.

El gol de 'la reina' sentenció la cuarta edición del Gamper, que se quedó en casa. Putellas levantó el trofeo con el brazalete de capitana para inaugurar una temporada donde el Barça solo tiene un objetivo: prolongar su reinado.