Entrevista

Jordi Llansamà reedita 'Harto de todo': "La comida ni siquiera figuraba en la pirámide de necesidades del punk de Barcelona"

BCore y Males Herbes dan nueva vida a la fundamental historia oral del punk y el hardcore barceloneses de los años 80, con prólogo de Kiko Amat, 13 años después de la primera edición del libro

Pilar, la madre de los punks de Barcelona

Asistentes a un concierto de Skatalà, en 1986

Asistentes a un concierto de Skatalà, en 1986 / Xavier Mercadé

Ramón Vendrell

Ramón Vendrell

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Jordi Llansamà entrevistó a 40 protagonistas de la escena punk y hardcore barcelonesa de los años 80 para 'Harto de todo'. El libro, subtitulado 'Historia oral del punk en la ciudad de Barcelona 1979-1987' y publicado en 2011, se convirtió en un clásico instantáneo de la literatura rock española. Su autor, que formó parte de ese movimiento subterráneo y que en 1990 fundaría el sello discográfico BCore, aún dando guerra, rescata ahora en comandita con la editorial Males Herbes esta obra mayor.

Jordi Llansamà, autor de 'Harto de todo', en la tienda de discos BCore, en Gràcia

Jordi Llansamà, autor de 'Harto de todo', en la tienda de discos BCore, en Gràcia / Marc Asensio

¿Qué fue para usted lo mejor que aportó el punk?

El 'do it yourself' (DIY). Permitió que muchos francotiradores hiciesen cosas. Y esto es un legado que aún está vivo: no esperes a que te lo hagan, háztelo tú mismo. Aunque ahora no puedes ser puramente DIY en la música. Si no pones las canciones en plataformas, nadie va a llegar a ti como sí llegaba antes gente con las casetes y los fancines. Estás obligado a utilizar las herramientas de compañías multinacionales por mucho que estés contra ellas.

Retrata una escena cerrada. ¿Por qué tuvo en su momento poco impacto popular?

En primer lugar, porque no tenía altavoces. Radio PICA y cuatro fancines. Y en segundo lugar, porque no era para todos los públicos, no a todos los jóvenes podía interesarles. Al principio la formaba gente muy de calle. Después entró gente más formada. La combinación hizo que evolucionara de lo destructivo a una cosa más constructiva.

¿Los grupos se sentían a gusto en ese ámbito autosuficiente pero restringido o, por el contrario, se sentían frustrados por no salir de allí?

GRB, por ejemplo, nunca sonaban bien y siempre se quejaban de ello. Tenían una mirada trascendente. Ahora los jóvenes forman un grupo y son especialistas en concepto y márketing 'online'. No son grupos montados solo para disfrutar. Hay unas intenciones comerciales. Esos grupos no buscaban nada de esto cuando empezaron. Posiblemente sí a partir de mediados de los 80: girar, mejorar, crecer... Pero al principio no pensaban más allá del día de hoy y de su entorno.

L'Odi Social, en una actuación en el 'gaztetxe' de Andoain

L'Odi Social, en una actuación en el 'gaztetxe' de Andoain / Txisto / Archivo Gos

¿Qué bagaje cultural tenían los primeros punks barceloneses?

Variado. Me parece significativo que, siendo autodestructivos, que no pocos lo eran, algunos de ellos hicieran cosas de vanguardia. Había mucha calle, como he dicho, pero el porcentaje artístico también estaba allí.

Si lo que querías era velocidad, qué mejor que el 'speed'

¿Qué influencia tuvieron las drogas?

Uno: diversión. Y dos: consecuencias. Algunos de los mayores pillaron con la heroína. En cambio, la droga por excelencia del hardcore fue el 'speed'. Si lo que querías era velocidad, qué mejor que el 'speed'. ¿Que no tenían información? Igual lo que no tenían era miedo.

¿Es en este sentido que los califica de "kamikazes" en el epílogo de la nueva edición de 'Harto de todo'?

Soy un poco más joven que la mayoría de ellos. Iba a conciertos en cualquier pueblo o ciudad y no recuedo pensar en la comida en ningún momento. La comida ni siquiera figuraba en la pirámide de necesidades. Pero no me refiero con "kamikazes" a noches seguidas sin dormir y de drogas. O no solo. Me refiero sobre todo a lo extremo de sus posturas. En el fondo, mola, porque la decisión fue suya, y tomada a conciencia.

Fueron sus referentes. No obstante, como generación, o generaciones, ¿tiene algo que reprocharles?

Reprochar... Claro que no. Pero no quedó reflejada la cantidad de peña creativa y con ideas que había, en forma de directores de cine o diseñadores, da igual. Eso faltó y me habría gustado.

GRB, en una actuación en la que formaron cartel con Negazione

GRB, en una actuación en la que formaron cartel con Negazione / Archivo Yuju

Algunos testimonios cuentan episodios de sectarismo puro.

Yo era el primer sectario. En la escena hardcore, que fue la que viví, éramos sectarios. Éramos 'hardcoretas' de manual y cuando Joni D se presentaba con una camiseta de Barricada, para mí eso era como el tifus. La camiseta tenía que ser de 7 Seconds o de Black Flag. Pero Joni era más abierto y sabía que políticamente había lazos con Barricada y ese tipo de grupos. Había unos dogmas que cumplir. Tenía su gracia.

MDC tocaban como cinco veces más rápido que cualquier grupo que se hubiera oído aquí, y con técnica de grupo de jazz

¿Por qué la actuación de Millions of Dead Cops (MDC) en Zeleste en 1984 fue tan importante?

No fui. Es un 'falti' que pagaría por subsanar. Pero fue crucial. La gente hacía punk o punk acelerado y llegaron MDC y lo dinamitaron todo. Políticamente estaban superposicionados e intentaban que su mensaje llegara a la gente, para lo cual antes del concierto repartieron las letras. Antes de tocarlas, explicaban las canciones. Llegaron con cosas como el vegetarianismo cuando aquí estábamos con los jamones colgados en las tascas. El cantante era gay, y ser gay no estaba muy bien visto en el punk de la época. Tenían un discurso claro contra las corporaciones. Y tocaban como cinco veces más rápido que cualquier grupo que se hubiera oído aquí, y con técnica de grupo de jazz. La cabeza de la gente hizo ¡bum!

Kangrena

Kangrena / Archivo Yuju

¿Qué dos discos resumen esa escena?

Necesito tres. El epé de L'Odi Social 'Que pagui Pujol' y las maquetas de GRB y Subterranean Kids. Me dejo el punk, pero para mí estas tres grabaciones son el catecismo hardcore.

¿Por qué las maquetas de GRB y Subterranean Kids, si ambos publicaron elepés?

Son maquetas publicadas, eh. Subterranean y GRB ensayaban juntos en un local de Conde del Asalto [ahora Nou de la Rambla] y yo me pasaba tardes ahí. Esas maquetas son puras. La música que yo integré en mi cuerpo.

Su epílogo 2024 transmite sensación de fracaso generacional.

No era mi intención. Es más bien un sentimiento mío. Quiero a esos grupos y a esas personas y me saben mal algunos finales. También me sabe mal que entraran, entráramos, porque me incluyo, en la rueda de errores criticada. Gente tan 'smart'... Por eso titulo el epílogo 'Amor amargo', como la canción [del Dúo Dinámico para Bruno Lomas].

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