PSC, Junts, 'Comuns' y ERC exhiben gobierno metropolitano a cuatro: "El AMB trasciende colores políticos"

Un mes después de la constitución de los nuevos ayuntamientos catalanes tras las elecciones municipales del pasado 28 de mayo (28M), el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) ya tiene gobierno para coordinar durante el mandato 2023-2027 las políticas metropolitanas en los 36 municipios de la conurbación del entorno de Barcelona, incluida la capital catalana.

PSC, Junts, 'Comuns' y ERC, por orden de proporción de voto metropolitano el 28M, han exhibido este 25 de julio el pacto de gobierno cuatripartito del nuevo AMB, que tal y como adelantó EL PERIÓDICO revalida la coalición ya vigente hasta la fecha y que gestionará el tercer presupuesto más elevado del sector público catalán, unos 2.470 millones de euros en total.

El nuevo acuerdo de gobierno ha sido presentado ante la prensa por los firmantes de cada partido: Antonio Balmón (PSC), vicepresidente ejecutivo del AMB y alcalde de Cornellà de Llobregat, quien ha liderado las negociaciones durante las últimas semanas; Isidre Sierra (Junts), vicepresidente del AMB y alcalde de Sant Climent de Llobregat; Lluís Mijoler ('Comuns'), vicepresidente del AMB y alcalde de El Prat de Llobregat; y Oriol López (ERC), vicesecretario general de Coordinación Interna republicano y hasta junio concejal en Mollet del Vallès.

"Desde el año 2011 venimos construyendo este consenso porque las competencias que ejercemos necesitan de una mirada amplia independientemente de los resultados de cada fuerza política", ha afirmado Balmón, que ha enfatizado que este próximo mandato será la primera vez que un socialista, en este caso el alcalde de Barcelona Jaume Collboni (PSC), como ya adelantó este diario, presidirá la institución desde el nacimiento del nuevo AMB en 2010.

Collboni presidirá el nuevo Área Metropolitana de Barcelona a partir del próximo 27 de julio

A la idea de que el AMB trasciende los colores políticos han apelado también el resto de firmantes en el sentido de unir fuerzas para configurar una administración sólida con capacidad de interlocución con otras grandes administraciones como la Generalitat, el propio Estado o instituciones europeas.

"El acuerdo sobre todo es respeto", ha incidido Balmón alejándose de "las polémicas y la confrontación innecesaria", que al mismo tiempo ha admitido el gran peso socialista (el PSC obtuvo el 28M el 26% del voto metropolitano, unas 335.000 papeletas, 140.000 más que Junts como segunda fuerza metropolitana) entre los nuevos 90 consejeros metropolitanos.

"El pacto es natural en el municipalismo"

"Independendientemente de nuestro color político, debemos trabajar conjuntamente desde el municipalismo", ha expuesto Sierra, quien se ha atrevido a poner de ejemplo el AMB "a otras administraciones" sobre cómo fuerzas de ideología dispar llegan a consensos amplios.

"Los alcaldes no podemos hacer solos políticas conjuntas con una perspectiva metropolitana", ha ratificado Mijoler, quien ha exigido "más competencias y financiación" a Generalitat y Estado para el AMB. "Debemos consolidar el AMB como institución de referencia en Catalunya", ha rematado López.

Consultado por los periodistas sobre por qué el consenso en el AMB no se ha dado también en otras administraciones como por ejemplo las diputaciones (en la de Barcelona, este mismo 25 de julio se ha sumado ERC al gobierno de PSC, 'Comuns' y díscolos de Junts, informa Sara González), Balmón ha bromeado comentando que "esto es el AMB, aquí no veo ninguna diputación".

El PSC ­deja atrás a ERC y la extrema derecha irrumpe en el ‘cinturón rojo’ de la Gran Barcelona

Tanto el alcalde de Cornellà como el de El Prat o Sant Climent han insistido en que "el pacto es natural en el municipalismo", vinculando la idiosincrasia local con el consenso político: "El AMB trasciende colores políticos", han aseverado al unísono los firmantes.

De hecho, el propio Balmón ya adelantó a este diario haberse puesto en contacto con el alcalde de Badalona, Xavier Garcia Albiol (PP), para que, pese a no integrar el ejecutivo metropolitano, los populares -con alcaldías tan relevantes como Badalona o Castelldefels- se impliquen en la "gobernanza institucional" del AMB a través de la comisión que deberá redactar el Pla d'Actuació Metropolità (PAM), la hoja de ruta del Gobierno metropolitano.

Seguridad, igualdad y el desarrollo del PDU metropolitano

El mandato 2023-2027 del AMB estará marcado por retos en torno a la coordinación metropolitana de políticias como las seguridad, igualdad, cambio climático, renovación del ciclo del agua o digitalización, tal y como a priorizado Balmón.

También será el mandato en que deba aprobarse provisionalmente y desarrollarse el Plan Director Urbanístico (PDU) metropolitano, aprobado inicialmente a finales del pasado mes de marzo, que marca la hoja de ruta de la connurbación barcelonesa de cara al próximo cuarto de siglo.

Se retomará asimismo el denominado Pla Estratègic Metropolità (PEMB), con el eterno debate sobre gobernanza de hasta dónde debe llegar la soberanía del AMB: si limitarse a los actuales 36 municipios o expandirse a la región metropolitana, donde grandes ciudades como las cocapitales del Vallès, Sabadell y Terrassa, o Mataró llevan años pidiendo su lugar.

Durante el último mandato ya se escenificó el desacuerdo en torno a esta cuestión entre los Comuns de Colau, que abogaba por la vía amplia, y el PSC, que no la acaba de ver. La conversación volverá a estar encima de la mesa de un AMB donde, eso sí, después de las últimas elecciones municipales del 28M los socialistas ganan todavía más peso.

A la presentación del nuevo acuerdo de gobierno del AMB también se han dejado ver personalidades vinculadas al ámbito político barcelonés como Elisenda Alamany (ERC), que se postula al relevo de Ernest Maragall (ERC) en el Ayuntamiento de Barcelona; Jaume Graells, concejal de ERC en el Ayuntamiento de L'Hospitalet.