Pogacar ya es el 'Caníbal' del siglo XXI

¿Por qué Pogacar es el mejor del mundo?

Siempre puede resultar complicado y discutible atribuir este tipo de rol a un deportista dentro de su especialidad. En ciclismo y en la actualidad enseguida aparecen otros dos nombres en clara competencia con Pogacar. Son Jonas Vingegaard, que lo venció en el Tour el año pasado, y Remco Evenepoel, que cerró en 2022 una temporada de ensueño con victorias en la Vuelta, el Mundial y clásicas como la Lieja-Bastoña-Lieja. Sin embargo, Evenepoel todavía no se ha atrevido con el Tour y a su edad Pogacar ya lo había ganado y Vingegaard, pese a la extraordinaria fortaleza demostrada en julio pasado en carreteras francesas, siendo dos años mayor que su rival esloveno tiene un palmarés mucho más moderado con 13 victorias y nunca, hasta ahora, se ha prodigado en pelear por todo aquello que corre. Se le podría considerar un prototipo de corredor más clásico a la hora de sacrificarlo todo, colocarse un dorsal como entrenamiento y centrar todo el año con el objetivo de llegar a París vestido de amarillo.

¿Por qué cuando ataca nadie puede seguirlo?

Esta semana en Andalucía dos ciclistas españoles que han estado cerca de Pogacar y con una clase exquisita, Enric Mas y Mikel Landa, han comentado que es imposible seguirlo cuando cambia de ritmo. Otros corredores, a la hora de atacar en una montaña o un repecho, aceleran, se van y luego se ponen a la misma velocidad que sus perseguidores por los que estos, acelerando poco a poco, sobre todo si van a relevos, al final tienen la posibilidad de capturarlos. En cambio, Pogacar es diferente. Suele efectuar dos cambios de ritmo; en el primero asfixia a sus rivales y en el segundo los remata. Cuando se fuga, yendo solo, es capaz de ir más rápido que sus rivales trabajando a relevos. Y esto lo hace en cualquier terreno. Se está comprobando esta semana en las tres victorias conseguidas. En la Jaén Paraíso (lunes, 13 de febrero) demarró en un tramo sin asfaltar. En la primera etapa de la Vuelta a Andalucía (miércoles, 15 de febrero) se fugó de forma más habitual con un ataque en la montaña. En la segunda etapa (jueves, 16 de febrero) ganó en la meta en el esprint final cuando anuló a Enric Mas, el único que osó cuestionar su victoria. Por cierto, el ciclista mallorquín ha sido el último corredor capaz de haberlo ganado y que le ha privado de conseguir seis victorias consecutivas entre el final de la temporada pasada y el inicio de 2023. Mas lo venció en octubre pasado en el Giro de Emilia.

¿Por qué ha cambiado su calendario a última hora?

El conjunto UAE, donde corre Pogacar, expuso a principios de año un calendario con 26 días de competición hacia el Tour que lo llevaba a participar en las mismas carreras con las que se había presentado las dos temporadas anteriores a la salida de la ronda francesa, casi siempre acompañadas de victoria, tanto en carreras de un día como de una semana. Sin embargo, a última hora, la estrella eslovena ha variado su plan de competición hasta el Tour. Ha eliminado del programa todas aquellas carreras que ya había ganado anteriormente, como el Tour de los Emiratos, precisamente la carrera que impulsa su patrocinador, o las pruebas italianas de la Strade Bianche y la Tirreno-Adriático. Lo ha hecho para buscar nuevos alicientes, no anclarse en las victorias del pasado, y ampliar su palmarés con carreras nuevas. Por eso, entre otras, se ha apuntado a la París-Niza, feudo de ganadores de Tour. Y por esta razón, salvo que Vingegaard cambie de opinión, los dos astros se encontrarán en la ‘Carrera del Sol’ antes de la ronda francesa cuando inicialmente no cruzaban sus caminos hasta la salida de Bilbao de la Grande Boucle, el próximo 1 de julio.

¿Hasta cuándo puede seguir ganando Pogacar?

Si se cita de nuevo a Eddy Merckx se recordará que ganó el Giro con 22 años y el primero de sus cinco Tours con 24. Sin embargo, a los 30 años ya era un ciclista maduro que empezaba su declive que se acentuó de forma alarmante en 1976 para acabar retirándose cuando todavía no había cumplido lo 33. A diferencia de Pogacar, y de todos los corredores contemporáneos, Merckx competía cada año por encima de los 100 días con lo que su físico se deterioró mucho antes de lo que acostumbran a hacer ahora los astros de su deporte, como Alejandro Valverde, que se retiró el otoño pasado con 42 años. Y aunque competir a la edad de la estrella murciana resulte casi un hito, ahora cualquier corredor, al no superar los 75 días de competición al año, con intervalos de descanso entre medio, puede llegar al máximo nivel en la madurez de los treinta y pico de años. En el caso de Pogacar estará corriendo, siempre con una semana de descanso entre medio, hasta finales de abril para descansar luego hasta junio y correr el Tour. Luego, siempre y cuando no se apunte a la Vuelta, algo que había anunciado los dos últimos años para renunciar al final, volverá descansar otro mes para afrontar en septiembre la recta final de la temporada. De este modo, la agresión física es mucho menor a la que sufrió Merckx y el resto de sus competidores hace 50 años.

¿Será capaz de ganar todo lo que corra este año?

Es difícil, evidentemente, y seguro que alguna etapa, por sus características, por ejemplo la que el domingo finiquita la Ruta del Sol, quedará fuera de su alcance, al menos por cuestiones tácticas o hasta para no degastar a sus compañeros de equipo. Pero las metas trazadas en París-Niza, Milán-San Remo, Tour de Flandes y Lieja-Bastoña-Lieja las tiene marcadas en rojo y si se las ha anotado en este color es para avisar a otros navegantes sobre la bici de que piensa ir a por ellas.