Barcelona 'vuelve al cole' con 1.463 alumnos más que el curso escolar anterior

El curso escolar ha arrancado este lunes en Barcelona con 167.533 alumnos, 1.463 más que el curso anterior, de los cuales más de 8.800 forman parte de la red de guarderías municipales, y con un 2,2 % más de docentes que impartirán clases en las aulas.

Durante el presente curso, la red de guarderías municipal ofrece un total de 8.845 plazas en 105 centros, distribuidas en 624 grupos, que se suman a las 326 plazas que ofrecen las de la Generalitat.

Esto es lo que cuesta la vuelta al cole este año

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha participado del inicio del curso en el Instituto Escolar Arts, en el distrito de Sants-Monjuïc, tras la finalización de las obras de ampliación y remodelación que permiten agrupar las escuelas de primaria y secundaria, además de la guardería.

El edificio ha sido ampliado en 1.600 metros cuadrados, pasando de los 3.900 a los 5.600, con trabajos que incluyeron la reforma del patio del edificio, una nueva cocina y un nuevo comedor, entre otros espacios intervenidos.

Estas obras requirieron una inversión municipal de nueve millones de euros, que totalizan 42,8 millones en 83 actuaciones realizadas por el consistorio en distintos establecimientos educativos durante el verano.

19,5 millones de inversión de la Generalitat

A ello se le agregan otros 19,5 millones de euros que ha invertido la Generalitat en escuelas de Barcelona, para realizar un total de 95 intervenciones en todo el año en el sistema educativo de la ciudad.

"Estas inversiones significan una reivindicación de la tradición de Barcelona por la educación pública", ha manifestado Collboni.

El alcalde también ha hecho referencia al Plan Calor, que ha comenzado a implementarse este verano, destinado a climatizar todas las escuelas primarias públicas de la ciudad, cuya energía necesaria para su funcionamiento provendrá de paneles fotovoltaicos que se instalarán en los mismos establecimientos.

De esta manera, se busca atacar tanto las causas como las consecuencias del cambio climático, creando ambientes más confortables para alumnos y docentes, y también generando energía renovable y limpia.

Durante este verano se han intervenido 24 edificios escolares y eso continuará durante los próximos cinco años para llegar a todas las instituciones públicas, obras que se financian con un porcentaje de lo que se recauda con la tasa turística.