Los Mossos investigan una muerte accidental en la Torre Glòries de Barcelona

Una mujer ha muerto este lunes en el sótano de la Torre Glòries de Barcelona, por causas que aún se desconocen. Los Mossos d'Esquadra investigan el fallecimiento y barajan por ahora como principal hipótesis un accidente laboral, puesto que la víctima trabajaba en este rascacielos.

Portavoces de la policía catalana exponen que alrededor de las 12h del mediodía han recibido un aviso del Servei d'Emergències Mèdiques (SEM), el primer cuerpo de urgencias que se ha desplazado al lugar. Al llegar la persona ya había fallecido. Fuentes de la propiedad de Torre Glòries, Merlin, consultadas por EL PERIÓDICO, precisan que se trata de "un accidente laboral en un almacén de un arrendatario" del edificio, en una planta subterránea, sin precisar qué empresa lo tiene alquilado. Así pues, en ningún caso la trabajadora se habría precipitado por el exterior desde las alturas, sino que el origen del suceso sería de otro tipo.

El SEM ha trasladado la información a los Mossos d'Esquadra, que tienen abierto una investigación por probable muerte accidental. Efectivos de la policía científica analizan este mediodía el escenario y el cadáver de la víctima en busca de respuestas. Hacia las 16:30h ha accedido al parking del inmueble una comitiva judicial de cinco personas, entre ellas una jueza de guardia, un sarjento de Mossos d'Esquadra y un miembro del equipo de seguridad privada, para proceder al levantamiento de cadáver.

Según el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSST), "se entiende por accidente de trabajo toda lesión corporal del trabajador que sufra con ocasión o por consecuencia de la actividad profesional, considerándose también accidente de trabajo el que sufra el trabajador al ir o al volver del lugar de la prestación de la actividad, o por causa o consecuencia de la misma".

Cuatro subterráneos

La Torre Glòries tiene 34 plantas de altura sobre rasante, más 4 subterráneas con un gran aparcamiento de 300 plazas y zonas de servicios. También contiene un auditorio para más de 350 personas. La diseñó el premiado arquitecto Jean Nouvel junto al despacho local b720 Fermín Vázquez Arquitectos, autores del vecino mercado de los Encants. La construcción, a cargo de Dragados, tardó unos seis años.

El edificio fue inaugurado en 2005 como sede de la empresa Agbar, que en 2015 se trasladó a la Zona Franca. El fondo de inversión Emin Capital la compró para convertirla en un hotel, pero al no lograr licencia desistió del proyecto. Finalmente Merlin Properties la adquirió en 2017 por 142 millones de euros e invirtió alrededor de 15 millones de euros más en obras de adaptación para convertirse en un rascacielos de oficinas multiinquilino. Aloja múltiples empresas, entre ellas varias grandes start-ups del sector tecnológico y call centers, además de un popular mirador en la cúpula superior abierto en 2022.