'Making of'

Así preparan los vecinos de Gràcia los adornos de la fiesta mayor: bodas en Las Vegas, papiroflexia y Holanda

Miembros de las asociaciones de la plaza Rovira i Trias, Fraternitat de Baix y Joan Blanques de Baix de Tot relatan cómo afrontan el proceso, una forma de vida comunitaria que les llena y les agota

Mapa de todas las calles adornadas de las fiestas de Gràcia 2024 en Barcelona

Las fiestas de Gràcia 2024 tendrán un domingo sin conciertos y 23 calles decoradas

Vecinos se preparan para las Fiestas de Gràcia 2024

Vecinos se preparan para las Fiestas de Gràcia 2024 / Vídeo: Jordi Otix / Edición: Laly Chávarry

Toni Sust

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Los vecinos de Gràcia que participan en la decoración de las calles para la fiesta mayor son personas que en septiembre no se quieren ni ver. Es algo que resulta comprensible, al conocer de cerca el proceso: pasan muchísimo tiempo juntos durante el resto del año. En agosto la cosa se intensifica hasta el punto de que en los últimos días antes de las fiestas de Gràcia, prácticamente viven en los locales en los que preparan los adornos.

Este diario visitó, entre el jueves y el viernes de la pasada semana, a vecinos que adornan tres de las calles de la antigua Vila: los de la plaza de Rovira i Trias, los de Fraternitat de Baix y los de Joan Blanques de Baix de Tot. Todos estaban manos a la obra. Quedan 10 días para que comiencen las fiestas y bastante por hacer.

Así se preparan las fiestas de Gràcia 2024

Así se preparan las fiestas de Gràcia 2024 / Vídeo: Manu Mitru / Edición: Laly Chávarry

El calendario

En la bodega Casas, en la calle de la Providència, un refugio fantástico, cuatro miembros de la Associació de Veïns de la plaza Rovira explicaban con entusiasmo su labor en la decoración de la plaza para las fiestas: Carlos Rosales –presidente del colectivo–, Eva Gómez, Elena Rich y Anna Mercadé.

Preparativos de los vecinos de la plaza Rovira.

Preparativos de los vecinos de la plaza Rovira. / Manu Mitru

“Estos días empezamos a hablar ya de la temática del año que viene, pero no decidimos hasta enero o febrero. En septiembre no nos queremos ver”, resume Rich. La asociación no solo se ocupa de las fiestas, y de septiembre a enero hace cenas, vermuts, lotería de Navidad y, por norma, reuniones los miércoles. “Nos empezamos a meter fuertes en el tema en abril, abrimos el local en días fijados y a partir de junio hay más intensidad. Todavía más a partir de julio y los últimos 15 días no estamos 24 horas pero casi”, explica Rosales. “Somos fáciles en esto, surge una idea y en seguida nos animamos”, relata Mercadé sobre la elección anual del decorado.

Elvis, bodas... y divorcios

Este año, la plaza Rovira se viste de ‘Wedding chapel’: quiénes lo deseen podrán acudir a que un Elvis les case. Ese Elvis será Rosales. El presidente, vestido como el Rey del rock, oficiará los enlaces como si de Las Vegas se tratara. El bar será una iglesia. Y como siempre hay que dejar una puerta abierta a los que se precipitan, el último día se podrán celebrar divorcios.

El año pasado montaron un mariposario, y quienes lo deseaban podían tener una foto con lepidópteros gracias a un QR. Además, a raíz del tema buscan una oenegé que se asocie a la fiesta. El año pasado fue la asociación  ‘Pell de papallona’, centrada en la epidermólisis bullosa, que provoca la fragilidad de la piel en niños. Se vendieron mariposas para recaudar dinero para la investigación de la dolencia. Este año, la entidad invitada es una asociación que combate los matrimonios forzosos.

Papel de EL PERIÓDICO para las fiestas de Gràcia.

Papel de EL PERIÓDICO para las fiestas de Gràcia. / Manu Mitru

El papel de EL PERIÓDICO

EL PERIÓDICO tiene una pata en esa maquinaria de preparación, porque este diario, en virtud de un convenio con la Fundació Festa Major de Gràcia, entrega 30 kilos de papel de diario a las 23 comisiones de fiestas. En total, 690 kilos de papel, que en la Rovira se convertirán en ramas que formarán parte de la recreación de esas bodas de Las Vegas.

La idea de emular las capillas de Nevada llegó porque el patrón, representante de la asociación en la Fundació Festa Major de Gràcia, Joan Llusà, y su pareja, Esther Martínez, llevan tiempo con que si se casan. Y en su honor se eligió este escenario. Cosas de la vida: por primera vez en muchos años, Llusà y Martínez no estarán en las fiestas: tienen que viajar a Japón. A una boda.

“Esto más que voluntariado es colaboración”, afirma Rich. Vida comunitaria. Cuando llega la mención a los reñidos premios a las mejores decoraciones de las fiestas, los cuatro ‘rovirenses’ sonríen. No, dicen, no son un equipo que esté acostumbrado a la victoria. El año pasado quedaron terceros: “Fue un orgasmo total”, proclama Mercadé. Aseguran que con quedar entre los 10 primeros ya están eufóricos.

Los premios, cambio de fecha

Los premios tienen un peso relevante en la fiesta, aunque no siempre para bien. Uno de los efectos indeseados hasta ahora era que una vez se difundía quién había ganado, los visitantes se concentraban en las calles con premio, con los colapsos imaginables. Y dejaban de lado las colistas de la clasificación. Este año, la entrega de los galardones se retrasa al lunes 19, para que los festivos previos no registren esos llenos en algunas vías.

Vecinos de Fraternitat de Baix.

Vecinos de Fraternitat de Baix. / Jordi Otix

“Si te obsesionas con los premios, te acabas amargando”, afirma Marta Soteras, de Fraternitat de Baix. Lleva desde los 5 años, y ya más de 30, participando en la decoración de las calles para las fiestas, y asegura que sus padres son responsables de que nunca se vaya del barrio de vacaciones: para ella las fiestas son las vacaciones.

Navidad y papiroflexia

Soteras explica que para los vecinos que se ocupan de Fraternitat de Baix, y es de presumir que para los de otras calles, el premio es el camino: dedicarse a esa labor que dura meses. Y añade que el día 15, inicio de la celebración, es para los implicados en la decoración casi un final de temporada.

Fraternitat de Baix dedicó el año pasado su tramo de calle a la Navidad, y se centra este año en la papiroflexia, también en parte con papel de EL PERÓDICO. El convenio, cuentan en esta calle, les va muy bien, porque hoy la gente no lee tanto en papel y se informa más en digital, por lo que reciben menos donaciones de diarios viejos, claves para los adornos.

El del Fraternitat de Baix es un caso curioso: hace años, muchos de sus integrantes participaban en los adornos de la calle de Torres, pero hubo desacuerdos y una parte cambió de calle.

Trabajo para todos

Como en la Rovira, aquí en septiembre se descansa de los compañeros, lo que no evita que a veces ya se haya elegido el tema del año siguiente. Por ejemplo, a principios de agosto de 2023 ya habían elegido la papiroflexia para esta edición. Aquí, dice Soteras, a partir de octubre ya se está trabajando en algunos aspectos. Y la gracia es encontrar trabajo para todos los que quieren colaborar.

En otoño, las tardes de martes y viernes son para los adornos de la fiesta siguiente. Después de Navidad, también el jueves por la mañana (especialmente para jubilados y parados), y a partir de enero se le suma el último domingo de cada mes. “Ahora vivimos aquí todo el día, e intentamos que la gente venga tres días por semana, no más”, cuenta Soteras.

Joan Blanques de Baix de Tot

En la calle de Ramon y Cajal, el local está considerablemente lleno la tarde de este jueves. Allí desarrolla su actividad la Associació de Festa Major de Joan Blanques de Baix de Tot. Bettina Schaefer, secretaria de la agrupación, sostiene que el plan es que entre noviembre y diciembre haya una reunión para decidir los adornos del verano siguiente. En marzo ya se trabaja, se hacen pruebas.

Vecinos de Joan Blanques de Baix de Tot.

Vecinos de Joan Blanques de Baix de Tot. / Jordi Otix

El tema de este año, después que el anterior fuera “Tocats del bolet’, es Holanda. La forma de funcionar es peculiar. “Se decide el tema y todos hacen lo que quieren. Por ejemplo, María ha hecho 1.200 tulipanes”, explica Schaefer. María es María de Souza, que oye su nombre y levanta la cabeza antes de seguir trabajando.

Una vez todos han convertido en realidad sus propuestas, los elementos forman un conjunto. Este año se reproducirán elementos asociados a los Países Bajos: tulipanes, bicicletas, zuecos, queso holandés, arenques, el fútbol –con portería–, la lluvia, el traje regional, La joven de la perla...

Sobre los premios, Schaefer advierte: “No queremos ganar, no queremos quedar últimos. Preferimos quedar en medio y tener una calle que quede bonita y disfrutar durante las fiestas. No nos planteamos temas que no sean alegres”. También subraya que la previa es casi más emocionante que los días en los que las calles se llenan de visitantes: “Si eres de Gràcia, para ti las fiestas van del 22 de agosto al 15 de agosto del año siguiente”.

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