El 74% de las estancias en Alojamientos de Urgencia en Barcelona superan los seis meses

El 74% de las personas alojadas en Alojamientos Temporales de Urgencia de Barcelona (ATU) están más de seis meses en el dispositivo ante un 26% que encuentran una alternativa antes de los seis meses.

Según datos ofrecidos por la teniente de alcalde de Derechos Sociales, Maria Eugènia Gay, y la comisionada de Acción Social, Sonia Fuertes, en una sesión con periodistas este viernes, actualmente hay 3.075 personas alojadas en este dispositivo, de las cuales 1.421 son niños.

Estas personas son atendidas bajo el protocolo diseñado por el Institut Municipal de Serveis Socials (IMSS), que establece seis meses como estancia máxima en este tipo de alojamientos, y que el Ayuntamiento se comprometió a hacer una nueva propuesta después de que el pleno aprobara retirarlo.

El 27% está entre uno y dos años

A pesar de la estancia máxima establecida, más de la mitad están más tiempo: en concreto, unos 292 casos (el 27,3%) están alojados entre uno y dos años, y un 15% entre dos y más de tres años.

El 60% de adultos son mujeres ante el 40% de hombres y la franja de edad más abundantes en adultos es la comprendida entre los 30 y 40 años; y hay 263 personas acogidas solas (el 27% del total).

Un 41% de las familias acogidas son monoparentales (en el 92% de los casos la mujer es el adulto referente) y el 28% son familias numerosas (dos adultos y tres o más niños).

Respecto a la lista de espera, a fecha de 18 de julio hay dos personas con casuísticas diversas por su situación personal, mientras que en abril había una media de 48 personas sin cobertura de alojamiento temporal de urgencia.

"Servicio básico"

Gay ha asegurado que la prioridad del replanteamiento del protocolo es garantizar el alojamiento y dar autonomía a las personas usuarias, además de incrementar las ayudas económicas e intensificar el plan.

Fuertes ha destacado que en un inicio se estableció que fuera un servicio provisional para situaciones de urgencia, pero que ha terminado convirtiéndose en un "servicio básico", y que ahora han ordenado todo el circuito, con el que quieren acompañar a la persona si necesita más de seis meses.

Cambio en el protocolo

El cambio que ahora establecen en el protocolo es poner un equipo de apoyo que acompaña a los profesionales referentes para poder establecer al máximo las opciones que sean posible, "de garantía, de ingreso mínimo, temas de ocupabilidad" y dotar de herramientas a las familias, ha precisado Fuertes en declaraciones a los periodistas.

También destaca una mesa de casos complejos que es la que permite ver estas situaciones que requieren de un abordaje específico, como mayores y personas con un diagnóstico de salud mental con una discapacidad superior al 33%: situaciones que alertan de que "va mucho más allá de la exclusión residencial y que necesitan otro apoyo".