El nuevo contrato de alcantarillado de Barcelona, segundo más cuantioso, incorpora la limpieza de sumideros y mejoras en la inspección

El nuevo contrato de mantenimiento del alcantarillado de Barcelona para el período 2025-2033 incorpora novedades, como la limpieza de los sumideros y la mejora de la inspección de la red. El presupuesto para el período es de unos 184,2 millones, 3,4 millones más que el actual.

La Comisión de Ecología, Urbanismo, Movilidad y Vivienda ha aprobado la licitación del nuevo contrato, que tiene ocho años de duración más dos de prórroga. Se trata del segundo mayor contrato de servicios urbanos de la ciudad, detrás del de limpieza y recogida de residuos. En cuanto a los sumideros, la previsión es limpiar unos 15.000 cada año y unos 60 cada día.

El objeto de este contrato es el mantenimiento de la red de alcantarillado de la ciudad, la limpieza de las aguas litorales, el mantenimiento de las instalaciones y sensores del alcantarillado, las obras de conservación y las reparaciones.

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En una atención a la prensa previa a la Comisión de Ecología, Urbanismo, Movilidad y Vivienda, la primera teniente de alcaldía del Ayuntamiento de Barcelona, Laia Bonet (PSC), ha destacado su importancia "por su volumen y por una cuestión de sensibilidad". Recordó que cuando surgen incidencias que afectan a la red de alcantarillado se generan muchas problemáticas a abordar. "Era importante poder incorporar a esta puja la filosofía de anticiparnos y de aplicar un mantenimiento preventivo", ha comentado Bonet. Así, recordó que esta forma de proceder está alineada con los objetivos del 'Pla Endreça'.

Bonet detallado que una de las principales novedades es la incorporación de la limpieza de los sumideros con el objetivo de que estos estén preparados en caso de lluvias y "minimizar así el riesgo de inundaciones locales". La segunda novedad es la mejora de la inspección estructural de la red accesible con el objetivo de mejorar el funcionamiento y el estado de conservación de la red de drenaje y alcantarillado. Este servicio revisará 120 kilómetros de red cada año y permitirá detectar “patologías estructurales” y empezar acciones de prevención.

La teniente de Alcaldía ha destacado que cada uno de estos nuevos servicios contará con una brigada específica que dedicará todos sus esfuerzos a cumplir con estos propósitos. Aparte, ha remarcado que en cuanto a la limpieza de los sumideros, el servicio dispone de un plan de trabajo que comporta la limpieza de 60 al día.

El Ayuntamiento de Barcelona ha destacado que todas estas actuaciones se llevarán a cabo teniendo en cuenta criterios de sostenibilidad económica, social y ambiental. Así, se aplican criterios de sostenibilidad en los proyectos de obras y en el suministro de vehículos del contrato, con una flota más electrificada, y otras medidas para ahorrar energía y el uso de renovables.

Por su parte, se prevé la subrogación de la plantilla actual, formada por 201 trabajadores.

Mantenimiento y obras

Más allá de las novedades, el contrato sigue incorporando los servicios de inspección de la red para conocer el funcionamiento del alcantarillado y las necesidades de limpieza y, posteriormente, la propia limpieza planificada a partir de la inspección. Esta inspección permite priorizar aquellos puntos donde es más urgente la limpieza y mejorar aspectos como los malos olores.

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También se realiza la limpieza de las aguas litorales con la retirada de los objetos flotantes de la superficie del agua de las playas durante la temporada de playas. Se realiza con dos embarcaciones y una brigada de limpieza manual en el desvío. En 2023, estos equipos retiraron 14,9 metros cúbicos de residuos flotantes.

Además, se lleva a cabo un mantenimiento preventivo y correctivo de las instalaciones, depósitos, sensores y estaciones de bombeo, entre otros; así como obras de mantenimiento y conservación. Entre ellas se encuentra la sustitución o reparación de elementos como pozos, rejas, la reposición de tapas o la reparación de colectores. Por último, el contrato contempla equipos de gestión rápida de incidencias operativos durante todo el día todos los días del año.

Más de 1.600 kilómetros de red

La red de alcantarillado de Barcelona tiene unos 63 años de antigüedad media y 1.650 kilómetros de longitud. Al 52% se puede acceder y al 48% restante no. En total hay 80.000 sumideros, 54.000 tapas, 36 sifones, 33 entradas directas de aguas pluviales y 16 fosas de sedimentación.

La red tiene dos funciones: transportar las aguas residuales generadas a viviendas, comercios, establecimientos públicos, oficinas e industrias de la ciudad hacia las depuradoras; y, en segundo lugar, el drenaje del agua de lluvia. En total hay 13 depósitos de retención de aguas pluviales, que protegen