Turismo

Barcelona estudia encarecer la zona azul a los autobuses turísticos

El teniente de alcalde Jordi Valls propone gravarles con "un importe mucho más elevado" a los autocares que trasladan a viajeros que no pernoctan en la capital

Los autocares turísticos en paradas de bus amargan a vecinos del Park Güell de Barcelona

Autocar turístico en Barcelona.

Autocar turístico en Barcelona. / ALBERT BERTRAN

Europa Press

Europa Press

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El Ayuntamiento de Barcelona está estudiando encarecer la zona azul destinada a autocares turísticos para que tengan "un importe mucho más elevado", según explicó el teniente de alcalde de Economía, Jordi Valls, en el consejo de barrio de Sagrada Família este miércoles. "La pregunta es si pagan suficiente", ha cuestionado Valls, que ha desvinculado estos turistas, que visitan la ciudad desde lugares como Salou o Lloret y no duermen en la ciudad, de los que pagan el impuesto turístico para dormir en un apartamento, en un hotel o en un crucero.

Ha precisado que encarecer la zona azul destinada a autocares turísticos no solucionará "el tema del volumen de los autobuses que tiene la ciudad". En ese sentido, apuesta por limitar la capacidad de autobuses que tiene un entorno determinado, como la Sagrada Família.

Precisamente en el entorno de la Sagrada Família, el Ayuntamiento de Barcelona eliminó siete paradas de autocares turísticos de las calles Padilla y Consell de Cent para reubicarlas en tres nuevas zonas en la calle Marina. La intención era que dispusieran de aceras más espaciosas para asumir el flujo de turistas.

La medida reduce el número de plazas en la zona de 17 a 13. Se llevó a cabo tras las quejas de los vecinos sobre la "indisciplina" de los autocares turísticos, según explicó el Ayuntamiento.