Manual de supervivencia

Barcelona vivirá cuatro grandes cortes de metro este verano

TMB planea afectaciones destacadas en las líneas L5, L4, L2 y L10 Nord por obras que deberían estar terminadas antes de finales de agosto, cuando empieza la Copa América de vela

Nuevo récord de usuarios en el transporte público de Barcelona: 62 millones en abril en metro y bus

TMB busca nuevo contratista para terminar su gafada cochera de la Zona Franca

Un tren de la L4 del metro de Barcelona

Un tren de la L4 del metro de Barcelona / El Periódico

Carlos Márquez Daniel

Carlos Márquez Daniel

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El metro de Barcelona va más ligero durante los meses de verano. La demanda cae un 10% en julio y más del 20% en agosto, por eso TMB aprovecha estas semanas para profundizar en obras que exigen cortar líneas de metro y que obligan a los viajeros a buscar alternativas de movilidad. Este año se producirán cuatro afectaciones importantes, en la L5, la L2, la L4 y la L10 Nord. Lo bueno, que no se concentran en una sola zona y están bastante repartidas. Lo no tan bueno, que decenas de miles de personas (el 10% del total del pasaje estival, cerca de 155.000 personas) verán afectada su rutina. En total se invertirán 25 millones de euros y este año los proyectos no terminarán justo antes de la vuelta al cole. Acabarán en vísperas de la Copa América de vela, a finales de agosto. Las nuevas necesidades de la capital catalana. Pero vayamos por partes.

L5: de Cornellà Centre a Collblanc

L5: de Cornellà Centre a Collblanc

Entre el 25 de junio y el 1 de septiembre se producirá un corte en la línea 5 entre las estaciones de Cornellà Centre (uno de los extremos) y Collblanc. Durante estos dos meses está prevista la renovación integral de un tramo de la vía, que ha llegado al final de su vida útil. También se instalará, en Cornellà Centre, una 'bretelle', un cruce de vías que permite enlazar dos trazadas paralelas en un espacio muy reducido. Esto facilitará que la L5 gane capacidad de transporte (un tren más a partir de septiembre, con la idea de crecer conforme lleguen nuevos convoys) y una frecuencia de paso en hora punta por debajo de los dos minutos y 29 segundos.

Es el corte que más afectación tendrá, pues se espera que entre 66.000 y 72.000 viajeros tengan que buscar alternativa para llegar a su destino. TMB recomienda (y hace lo mismo con el resto de obras) optar por otras líneas de metro, en este caso, la L1. La empresa también pondrá en funcionamiento dos líneas de bus alternativo para cubrir la parte guillotinada. La primera (26 vehículos) irá de punta a punta del corte y pasará por Just Oliveres donde se puede coger la L1 y las líneas de Rodalies R4, R1 y R3. El segundo (tres buses), por cuestiones de tamaño del vehículo y tipo de calles, de Can Serra a Can Vidalet. También las líneas del Trambaix pueden asumir parte del pasaje.

Viajeros de la L4 del metro de Barcelona, el pasado 26 de junio

Viajeros de la L4 del metro de Barcelona, el 26 de junio de 2023 / Manu Mitru

L2: de Paral·lel a Sagrada Família

L2: de Paral·lel a Sagrada Família

Malas noticias para los turistas, que lo tendrán un poco más complicado para llegar al templo de Gaudí. La L2 de metro quedará cortada entre Paral·lel y Sagrada Família entre el 25 de junio y el 25 de agosto, justo antes de que empiece la Copa América de vela. En este caso, se trabajará en la substitución de las fijaciones de vía, cosa que permitirá reducir las vibraciones.

Afectará a unos 60.000 viajeros. La alternativa en metro es extensa: líneas L1, L3, L5 y L4 (todas ellas ampliarán su capacidad entre un 6% y un 12%) en distintos puntos coincidentes del trazado de la línea 2 que se queda sin servicio. También algunas líneas de autobús de TMB, como la D50, la H16 o la H12, se reforzarán para tapar el agujero del metro en este tramo entre el Poble-sec y el corazón del Eixample.

Un vagón de la L1 del metro de Barcelona.

Un vagón de la L1 del metro de Barcelona, durante la pandemia / Jordi Otix

L4: de La Pau a Selva de Mar

L4: de La Pau a Selva de Mar

La línea 4 también quedará cortada en uno de sus extremos, de La Pau a Selva de Mar, entre el 27 de julio y el 22 de agosto. TMB trabajará en mejoras de accesibilidad que deben permitir la colocación de un ascensor en La Pau y en la renovación de la señalización e instalación de una 'bretelle' que permita también incrementar la capacidad del transporte de la L4 en el futuro. Viajeros afectados: unos 33.000.

El metro vuelve a ser el mejor salvavidas para saltar este corte, especialmente la L2, que comparte parada en La Pau. TMB también propondrá un bus alternativo que cubrirá todo el tramo (y el resto de paradas afectadas) que queda sin servicio. Se cubrirá con nueve vehículos y una frecuencia de paso, en hora punta, de cuatro minutos. También se puede optar por el Trambesòs y la línea de bus V31.

Máquinas de venta de billetes, en una estación de metro de Barcelona

Máquinas de venta de billetes, en una estación de metro de Barcelona / Manu Mitru

L10 Nord: de Gorg a La Salut

L10 Nord: de Gorg a La Salut

A pesar de ser una línea de metro muy joven (solo 14 años de vida) se ha detectado un problema de vibraciones muy concreto en la estación de Gorg, donde además se colocará una 'bretelle' que permitirá enlazar dos vías paralelas en ambos sentidos en un espacio reducido. La obra, ebtre el 5 y el 25 de agosto, afectará a unas 7.000 personas al día.

Además de un bus lanzadera (dos vehículos) que pasarán en hora punta cada seis minutos. Entre La Salut y La Sagrera, todo el resto de la línea, el servicio será parcial, pues la configuración de vías no permite una ida y vuelta estándar en un solo convoy. Los viajeros deberán bajar en Bon Pastor, en ambos sentidos, para cambiar de vía y seguir en otro tren, ya sea en dirección La Salit o La Sagrera.

Si se toma como ejemplo los cortes de los veranos anteriores, puede darse bastante por seguro que los plazos anunciados se cumplirán. Antes era por el arranque del curso escolar, que multiplica las validaciones diarias. En 2024 será la Copa América de vela que arranca oficialmente el 26 de agosto. Sí hará disparar la demanda de metro, es todavía una incógnita, pero la ciudad, así lo quiere el consistorio, tiene que estar impecable.