Barcelona pide frenar los recortes en la sanidad pública durante el verano

El Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado este martes una proposición que el PP ha presentado en la comisión municipal de derechos sociales para instar al Departament de Salut a revertir la previsión de cerrar camas a lo largo del próximo verano. A su vez, el gobierno municipal del PSC ha aceptado un ruego de los comunes para que el consistorio reclame en el Consorci Sanitari de Barcelona que la decisión se anule.

La propuesta de los populares insta al consorcio a “exigir el Departament de Salut de la Generalitat que garantice la asistencia sanitaria en la ciudad de Barcelona evitando el cierre de camas hospitalarias, quirófanos y otros dispositivos sanitarios, como los centros de atención sanitaria”. Junts, PSC, Barcelona en Comú, PP y Vox han respaldado la petición, mientras que ERC -que gobierna la Generalitat en funciones- se ha quedado solo votando en contra. La republica Eva Baró ha opinado que el texto que el resto de grupos ha secundado busca “crear alarma social con un argumentario populista y sin fundamento”.

La concejala de Salud, Marta Villanueva, ha expresado la “alarma” del gobierno local ante la reducción de camas disponibles durante el próximo período estival, “superior que el verano pasado o el de hace dos años”, ha destacado. “Tendrá seguramente impacto en las listas de espera, lo que no nos podemos permitir”, ha advertido la edil, que ha apuntado a la prórroga de los presupuestos de la Generalitat como el detonante de los recortes.   

El pronóstico apunta a que el Hospital Vall d’Hebron deje de usar 272 camas en julio, agosto y septiembre; a su vez, la actividad quirúrgica programada no urgente del complejo quedará disminuida al mínimo. Aparte, dos hospitales que no forman parte del Instituto Català de la Salut cerrarán en agosto para ahorrar: son L’Esperança (que depende del Hospital del Mar) y la clínica Plató (dependiente del Hospital Clínic).

En atención primaria, no se prevén cubrir sustituciones en verano, cerrarán 13 de los 14 servicios de infecciones de transmisión sexual de Barcelona y se limitará la actividad de los centros de atención continuada de la capital, como los de Casc Antic o la Guineueta, que dejarán de abrir los sábados. En todo caso, Villanueva ha resaltado que el servicio se mantendrá "durante 12 horas” en los ambulatorios y que tienen “garantía de apertura”, incluidas las urgencias de atención primaria en los meses de verano.