Barcelona amplía la red de refugios contra el calor para sortear los días y horarios de más cierres

Barcelona contará con más de 350 equipamientos y espacios públicos donde refugiarse del calor veraniego, unos 120 más que el año pasado. El ayuntamiento ha presentado este lunes la activación de este recurso del 15 de junio al 15 de septiembre, con un refuerzo de puntos para paliar los huecos que dejaban los días y horarios de cierre. Y es que algunos de los lugares que sirven de cobijo, como por ejemplo bibliotecas o centros cívicos, mantienen su horario habitual y los periodos en los que preveían bajar la persiana por vacaciones.

La primera teniente de alcaldía Laia Bonet y la concejala de Salud, Marta Villanueva, han presentado este lunes el dispositivo municipal, llamado Plan Calor 2024. Entre las novedades de este año destaca la incorporación de varios mercados municipales, espacios de otras administraciones e inmuebles privados -gimnasios, centros comerciales...- que se han sumado por primera vez en la red.

Todos ellos son de acceso gratuito y, preferiblemente, con espacios para sentarse, fuente de agua y aseos de libre uso. La única excepción son las 41 piscinas públicas que entran en el cómputo pero en las que hay que pagar entrada según la tarifa vigente en cada una. Los refugios, que pueden ser al aire libre o interiores, están recomendados especialmente a personas vulnerables al calor, bebés, adultos mayores o personas con enfermedades crónicas que no dispongan de confort térmico en sus casas.

El consistorio asegura que esta temporada logrará una cobertura más efectiva de todos los barrios y que, de media, el 68% de los vecinos tendrán uno de estos refugios "a menos de 5 minutos de casa" a pie y el 98% tendrá como mínimo uno "a menos de 10 minutos". Los domingos de agosto, que la propia administración reconoce como el momento de mayor escasez de espacios abiertos, estas ratios bajan respectivamente al 44% y al 89% de la población.

Bonet ha remarcado que "la emergencia climática es una realidad que ya está aquí", que cree que se debe afrontar no solo por una cuestión medioambiental, también de salud. Villanueva ha destacado que este incremento de temperatura viene acompañado de un aumento en los ingresos hospitalarios, por lo que ve importante concienciar a la población de que el cambio climático "no solo tiene un impacto sobre la sostenibilidad, también en la salud de todos". Según la teniente, los descuentos sociales facilitarán que "ningún ciudadano se quede fuera de las piscinas públicas por una cuestión económica".

Fases preventiva, de alerta y de emergencia

El Pla Calor contempla tres fases durante el verano, según la temperatura que alcance Barcelona: preventiva, alerta y emergencia. El Centro de Urgencias y Emergencias Sociales de Barcelona (CUESB) actuará como referente de atención social. Durante la primera solo se hará difusión de medidas para evitar los golpes de calor y otros problemas derivados de las altas temperaturas. La segunda contará con un operativo en la vía pública durante la franja más calurosa para asistir a la población más vulnerable y el CUESB ofrecerá una sala especial.

En caso de activarse la tercera, si la temperatura máxima supera los 35,7 grados o la mínima sobrepasa los 27,9 grados, se habilitarán estancias diurnas en refugios climáticos para la población que presente mayor fragilidad e incluso pernoctaciones en el CUESB. El pasado año se batieron todos los récords de calor nocturno con 105 noches tropicales y 14 noches tórridas, mientras que agosto fue el mes más cálido en 110 años.

Juegos infantiles con sombra

Además de los refugios climáticos, Bonet ha señalado que la ciudad contará con otros espacios donde encontrar sombra, como 183 áreas de juego infantil. La mayoría de ellas pararán el sol gracias a las arboledas, pero otras como la de Can Batlló tienen carpas temporales en verano. Otro lugar donde encontrar sombra serán las 26 pérgolas fotovoltaicas que hay repartidas por toda la ciudad, que Bonet ha abierto la puerta a multiplicar en los próximos años. Asimismo, en la ciudad también hay más de 1.700 fuentes públicas de beber agua, de uso universal para la ciudadanía, que pueden ser localizadas con la aplicación para móviles Fuentes BCN.