Un torneo consagra el orgullo de La Mina por su equipo de fútbol femenino

El fútbol femenino le sienta bien a La Mina. Un club fundado para aliviar de carencias a los jóvenes, el Tramontana La Mina, formó en 2023 el primer equipo de chicas que compite en el barrio, uno de los que más población gitana alberga en Catalunya. El conjunto -inspirado por el triunfo de la selección española en el Mundial- se cimentó con muchachas de la comunidad calé. 

Se trataba de que el balón brindara una oportunidad también a las chavalas de la zona, que concentra algunas de las calles que declaran menos ingresos en el área metropolitana de Barcelona, acostumbradas a combatir solas por su dignidad. Pero de la creación y la existencia de la escuadra se destila algo aún más trascendente y poderoso: un mensaje contra los estigmas, los prejuicios y los temores aferrados a tradiciones ancestrales, unido a una descarada llamada de atención para no seguir retratando a la periferia a base de caricaturas. Bien se le puede juzgar como una de las réplicas más depuradas del 'Se acabó' proclamado por las filas capitaneadas por Alexia Putellas. 

Estreno, victoria y solidaridad

A lo largo del último año, el club y su sección femenina han obtenido reconocimientos de la Federación Catalana de Fútbol y de la Fundación FC Barcelona, con mención especial a las futbolistas, convertidas en referentes para las adolescentes y las niñas de La Mina. Este fin de semana, las mujeres del Tramontana han alcanzado otro hito, al jugar por primera vez en el torneo del club, ya una cita marcada en el calendario del popular vecindario anclado en Sant Adrià de Besòs, a las puertas de Barcelona. 

La competición ha culminado este domingo con un campeonato de fútbol femenino de categoría amateur, con varios equipos participantes que se han disputado la victoria en la zona deportiva de La Mina. En apenas un año, el equipo del Tramontana se ha consagrado como un emblema barrial, que concita el orgullo de sus vecinos y el aplauso más allá de sus límites.

Y el debut no ha podido ser más feliz para el equipo local, alzánadose con el torneo con una victoria ante el favorito Tibidabo en la final. "Ha sido una sopresa y una alegría", explicaba el fundador del CF Tramontana, Toni Porto, que ha recordado la precocidad de unas jugadoras que llevan juntas solo desde "septiembre de 2023".

Más allá del éxito social y deportivo, el club no quiso olvidarse de las necesidades más primarias de La Mina e hizo hecho un llamamiento durante los tres días del torneo para recoger comida y artículos de primera necesidad para las familias más necesitadas del barrio, donde la red comunitaria de solidaridad tejida por entidades y vecinos particulares se revela imprescindible. La idea era conseguir un kilo por cada futbolista que acudiera al campeonato y el reto, reunir 300 kilos de productos y la respuesta de los vecinos y familiares de las y los jugadores ha estado, como es siempre habitual en este barrio, a la altura.