El pacto entre republicanos y socialistas

Las políticas en las que ERC pretende incidir en Barcelona con su entrada en el Gobierno de Collboni

Los de Elisenda Alamany quieren dejar su sello en aspectos de gestión como el de la lengua catalana, el freno a los excesos del turismo, la vivienda y el Besòs

CONTEXTO | ERC, a un paso de entrar en el gobierno de Collboni: su militancia votará este jueves si aprueba el preacuerdo cerrado con el PSC

PACTO | ERC de Barcelona defiende el pacto con Collboni y asegura que la dirección del partido lo respetará si la militancia lo aprueba

Jaume Collboni saluda a Elisenda Alamany en un pleno municipal

Jaume Collboni saluda a Elisenda Alamany en un pleno municipal / MARTA PÉREZ / EFE

Toni Sust

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Tanto en la etapa de Ernest Maragall como en la de Elisenda Alamany, el grupo municipal de ERC ha mostrado preocupaciones por el estado de Barcelona que se parecían más a las de los Comuns que a las del PSC. Precisamente es ese uno de los objetivos que los republicanos verbalizan para justificar su entrada en el gobierno de Jaume Collboni, si esta finalmente se concreta con el aval de las militancias y si no se produce ningún veto inesperado por parte de la dirección de Esquerra: llevar a los socialistas a un cambio de rumbo.

Estos son los principales aspectos en los que Alamany se proponen condicionar el rumbo que lleva el gobierno de Collboni, y que ya marcaron en rojo en el acuerdo cerrado en febrero pasado por el cual el grupo apoyó los presupuestos del gobierno local.

Oficina del catalán

Oficina del catalán

ERC ha reclamado como condición para pactar la creación de la Oficina de la Lengua Catalana, un organismo que contará con un comisionado. El concejal Jordi Coronas ha destacado este miércoles el uso de la lengua va a menos. En el pacto de febrero, ERC apostó por que la oficina tenga un presupuesto anual de cuatro millones de euros. Entonces, el grupo advirtió de que la medida perseguía “desarrollar medidas para hacer del catalán la lengua de uso social generalizado en la ciudad, internamente, dentro del ayuntamiento, y externamente”.

Vivienda

Vivienda

El problema de la vivienda, y de la expulsión de barceloneses que tienen que irse por no poder sufragar un alquiler y mucho menos la adquisición de una vivienda, es uno de los que ERC señala como más grave de la ciudad. Por ello, su condición en este aspecto es lograr resultados mejores que los habidos en los últimos tiempos: sumar 1.000 pisos cada año al parque municipal. En los ocho años de Ada Colau como alcaldesa, Barcelona dobló ese parque, al incrementarlo en 4.000 pisos en los dos mandatos. Lo que supone aproximadamente la mitad de la cifra que se propone ERC.

Turismo

Turismo

ERC es partidaria desde hace años de tomar medida para contener los excesos del turismo, es decir las aglomeraciones y otras disfunciones. Los republicanos son los padres de algunas medidas ya impulsadas en el pasado, como las limitaciones de estancia de foráneos en grupo en zonas de Ciutat Vella y la implantación del recargo turístico. Ahora, se proponen un plan de 40 millones de euros de inversión anual en los barrios que mas sufren los efectos de la presencia de un gran número de visitantes. Además, ERC reclama apoyo al comercio de proximidad, en gran parte amenazado por las tiendas que venden productos dirigidos al turismo.

Pacificaciones

Pacificaciones

Las pacificaciones de calles son una medida que en Barcelona empezó a generalizarse a raíz de la pandemia del covid, cuando se dictaron normas de distancia mínima sanitaria que llevaron al gobierno de Colau a recortar espacio al vehículo privado para que los peatones pudieran pasear sin amontonarse. De ahí Barcelona en Comu fue a más y con el tiempo acabó manteniendo diferencia con sus socios del PSC sobre cómo afrontarlas. ERC defiende ahora profundizar en las pacificaciones, y en perseguir “una ciudad más caminable”, según reflejó en el acuerdo de febrero, ene l que incluyo un fondo de 15 millones para ese objetivo. Los republicanos piden pacificaciones en calles como la de Balmes y carriles bici en el paseo de Maragall y Fabra i Puig, así como en el paseo marítimo en Sant Martí.

El eje Besòs

El eje Besòs

El eje del Besòs es otro de esos asuntos que en principio preocupa a todos los grupos. Pero no todos consideran que el interés del resto sea real. ERC pone como condición para su entrada en el gobierno un especial interés en la zona y la creación de un comisionado para el Besòs. A petición suya, se incluyeron en los presupuestos para este año 10 millones para el eje.