TMB busca nuevo contratista para terminar su gafada cochera de la Zona Franca

La cochera de la Zona Franca se inauguró en julio de 1970 y fue la primera en albergar solo autobuses. No podía ser de otra manera, pues los tranvías acumulaban un lustro de ostracismo y rechazo social y, de hecho, se extinguieron (solo sobrevivió el ahora ninguneado Tramvia Blau) menos de un año más tarde, la madrugada del 18 al 19 de marzo de 1971. Con sus imponentes 50.000m² y capacidad para 300 vehículos, era una instalación innovadora, poderosa, ambiciosa; uno de los estandartes de TMB. Medio siglo después, en 2018, y tras varias ampliaciones, la empresa pensó que era el momento de transformarla de la cabeza a los pies. Pero las cosas se torcieron... Con la pandemia y la falta de suministros, y tras la caída de dos contratistas, la compañía ha tenido que volver a sacar a concurso la construcción del edificio corporativo, que quedó a medio levantar. La idea era que la nueva cochera estuviera terminada en 2021, pero entre una cosa y la otra se ha generado un retraso de al menos seis años.

Natalia Bigas es la directora del servicio de infraestructura de bus de TMB. En conversación con este diario, explica que al proyecto le quedan "dos años de ejecución para terminar" y que todo debería estar listo a mediados de 2027. El concurso público consta de dos lotes. El primero aborda la obra civil y la edificación. Y el segundo, las instalaciones, incluidas las industriales. Estos dos cometidos ya tenían asignados sendos contratistas en 2019, pero el año pasado, por "incumplimientos flagrantes del contrato", esos acuerdos tuvieron que ser rescindidos, con lo que fue necesario volver a iniciar todo el proceso de licitación para poder rematar la obra. Esas dos empresas privadas, no obstante, pueden volver a presentarse si así lo desean.

Pendientes 18 millones

Todo el complejo consta de cuatro unidades. Además del edificio de oficinas pendiente, hay dos talleres (con capacidad para 60 buses), uno de los cuales está terminado y el otro inició las obras en 2023, y un aparcamiento, que también está finiquitado. El inmueble corporativo tiene la estructura levantada y el remate del trabajo sale a concurso con un presupuesto de licitación de casi 18 millones de euros. Una cantidad que sin duda los aspirantes, como suele suceder con cualquier licitación pública, revisarán a la baja para tratar de seducir a TMB. Este miércoles era el último día para presentar las ofertas.

El proyecto se presentó el 19 de julio de 2018. Con 90.000 m² previstos -entre la cochera existente y un terreno adyacente- y capacidad para 550 vehículos, la nueva cochera de TMB, la más grande de las cuatro que la empresa tiene en Barcelona, tenía entonces un presupuesto previsto de 52 millones de euros. En 2027 habrá que ver si los seis años de retraso han generado algún sobrecoste.

Adiós, Ponent

Toda esta demora está alargando la vida de las instalaciones de Ponent, en Bellvitge, con capacidad para 139 autobuses y afectadas por el plan director urbanístico del sector Gran Via Llobregat. El Centro Operativo de Negocio (nombre oficial de las cocheras) de Zona Franca quedaría como único 'hub' de TMB a este lado de la ciudad, mientras que al norte se mantendrían operativos el de Horta y el de Triangle, con capacidad para 600 vehículos entre los dos.