Carolina Castro: "Siempre apetece regresar a Barcelona"

Carolina Castro, colombo-francesa de 45 años y madre de dos hijos adolescentes. Nacida en Bruselas, creció en Bogotá, ha vivido en Nueva York y París y reside desde hace 4 años en Barcelona. Lleva las Relaciones Públicas y de Prensa de Grupo Tragaluz, importante referente de gastronomía y buena mesa desde hace más de 30 años y el cual cuenta con más de 23 restaurantes singulares en varios puntos de España.

¿Por qué escogiste Barcelona?

Durante los 12 años que viví en París, mi hermana Rossana vivía en Barcelona, así que venía a menudo de visita y la ciudad me cautivó desde siempre. A raíz de la pandemia y en búsqueda de una ciudad con una calidad de vida agradable, Barcelona me pareció ideal.  Su tamaño, su cercanía con el mar y con la montaña, y su ubicación estratégica como puente entre Francia, el resto de Europa y América Latina, mis mundos, ha resultado perfecta para lo que buscaba. La mía fue una decisión consciente, yo quise vivir en Barcelona y una vez llegada he empezado a echar raíces.

¿Qué aspectos de la ciudad destacarías como positivos?

Barcelona tiene un tamaño perfecto, ideal para la movilidad, para conocer gente y para todo tipo de eventos. Hay personas de muchas nacionalidades y comunidades muy establecidas, me muevo entre varios grupos sociales, colombianos, franceses y, claro está, catalanes que me han abierto las puertas desde que llegué. Con frecuencia recibo amigos que vienen de visita y se asombran con su arquitectura y su oferta cultural y gastronómica, Barcelona es una ciudad a donde siempre provoca regresar. También ofrece muy buena calidad de vida gracias a sus espacios públicos, calles peatonales, parques y la cercanía del mar que procuro aprovechar mucho. Encuentro que hay mucha vida y un ambiente muy especial en toda la zona de playa y las marinas.

¿Qué aspectos de la ciudad hay que mejorar? ¿Cómo?

La seguridad es vital, escucho con preocupación historias sobre hurtos, algunos violentos y confío en que las autoridades puedan reforzar este aspecto para recuperar el nivel que le he conocido en otra época. La limpieza en las playas y en algunas zonas turísticas también es algo en lo que se puede mejorar, los visitantes que llegan a Barcelona deben llevarse la mejor impresión de nuestra ciudad, al igual que los habitantes que hemos hecho de ella nuestro hogar. En cuanto a la restauración, sector en el que trabajo, siento que en ocasiones hay falta de apoyo de la administración, valdría la pena tener una legislación más flexible que beneficie a todos. Resulta complicado obtener los permisos para tener acciones especiales de cara a los clientes, ponen límites extremos para las terrazas, y algunos restaurantes no logran superar las presiones de parte de la administración. 

¿Qué esperas de la Barcelona de los próximos años?

Quisiera seguir viendo resultados en aspectos medioambientales que siento que van por buen camino. Un buen ejemplo es la creación de calles peatonales con proyectos de urbanismo como el de la calle del Consell de Cent y más espacios verdes, parques y jardines como los que han sido inaugurados recientemente. Estoy segura de que la extensión del tranvía por la Diagonal contribuirá a conectar la ciudad y hacer más amables los trayectos, para que la gente pueda privilegiar el transporte público, mucho menos contaminante. Aprecio mucho la mezcla de culturas que se encuentra en Barcelona, donde turistas y locales convivimos creando una ciudad muy dinámica. Históricamente, Barcelona ha tenido mucha influencia y tránsito de mediterráneos y con la globalización esta mezcla se ha extendido a otros continentes, para un resultado muy interesante y cosmopolita, muy enriquecedor. 

¿Cuál sientes que es tu ciudad? ¿Qué es lo que más echas de menos?

Soy colombiana y también francesa, pero al pensar en mi ciudad es difícil decidir. Aunque crecí en Bogotá, he vivido la mayor parte de mi vida adulta fuera de Colombia y cada ciudad ha sido perfecta para mi momento de vida y mis retos profesionales. Hoy estoy feliz en Barcelona, me puedo proyectar aquí y me agrada mucho que mis hijos crezcan con tanta libertad en esta maravillosa ciudad que me ha abierto las puertas con cariño y excelentes oportunidades profesionales desde que llegué. Definitivamente, soy una "barcelonian by choice".