Política municipal

Collboni pide a la oposición renegociar los presupuestos para darles luz verde inicial la semana que viene

El alcalde reclama a los grupos que no rechacen el proyecto en la comisión extraordinaria de Economía del próximo 20 de febrero

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Jaume Collboni, alcalde de Barcelona, en su comparecencia en el Saló de Cent

Jaume Collboni, alcalde de Barcelona, en su comparecencia en el Saló de Cent / NORMA VIDAL / ACN

Toni Sust

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Jaume Collboni ha anunciado este miércoles que ha decidido acelerar el camino hacia la aprobación de los presupuestos de Barcelona para 2024, pendiente desde diciembre. “Tenemos que dar un paso decidido”. “Barcelona está en marcha, no puede detenerse y no se detendrá por no tener presupuesto”, ha agregado.

Y ha reclamado al resto de grupos municipales que permitan que el proyecto, que este jueves será aprobado en la comisión de gobierno, supere el primer trámite en la comisión de Economía, que se reunirá de forma extraordinaria el 20 de febrero, la semana que viene. “Es un llamamiento humilde”, ha recalcado.

Tres escenarios

Es decir, que el alcalde de Barcelona no tiene todavía el apoyo necesario, a la vista de lo que ha detallado, y quiere que la oposición se abra a negociar ese respaldo. Devuelve la pelota a donde estaba en octubre pasado. Collboni no ha mencionado la posibilidad de una cuestión de confianza, una forma de aprobar los presupuestos cuando no cuentas con el apoyo suficiene, a la que Ada Colau recurrió en 2016 y 2017 y que da un mes a la oposición para sumar los 21 concejales de la mayoría absoluta y elegir a otro alcalde. Si no lo logra, y no es fácil que se dé el caso, el proyecto de presupuestos prospera automáticamente.

Los escenarios posibles son tres: lograr el apoyo necesario para aprobar las cuentas en votación por mayoría, una cuestión de confianza y una prórroga, que tiene sentido si la oposición puede sumar los 21 ediles o en el último año de mandato, en el que la cuestión de confianza no está permitida por las normas.

"Comparezco para cumplir con la palabra dada. Me comprometí a que Barcelona tendría presupuesto en primavera, y mañana iniciaremos el procedimiento para conseguirlo. Barcelona tiene gobierno pero no presupuesto, y mi decisión como alcalde es que seguir adelante, aprobarlo mañana mismo en la comisión de gobierno y llevarlo a la comisión extraordinaria la semana que viene", ha anunciado el alcalde.

Acuerdos que necesitan dinero

Lo que hoy pido a los grupos es que nos permitan tramitar los presupuestos, por responsabilidad y por coherencia”, ha afirmado. También ha citado varios acuerdos cerrados últimamente con la oposición para subrayar a continuación que estos pactos cuestan dinero, y que por lo tanto precisan de la aprobación de las nuevas cuentas. Además, ha recordado que si no prosperan, se perderán 715 millones en inversiones. No lo ha mencionado, pero esa sería la consecuencia de una prórroga presupuestaria. Collboni ha relatado que el martes anunció a los grupos de la oposición su intención de aprobar el presupuesto en la comisión de gobierno de este jueves, para llevarlos a la comisión extraordinaria del día 20.

Respuesta de la oposición

El alcalde ha recibido rápidamente respuesta de algunos de los grupos de la oposición. Por Junts per Barcelona, Jordi Martí Galbis ha advertido de que el grupo de Xavier Trias no cambiará de posición si el proyecto de las cuentas se mantiene en las mismas líneas: “Si no hay ningún movimiento del gobierno, no podemos apoyar la tramitación”.

Y no solo eso. Martí Galbis ha recordado que Junts no tiene intención de negociar el presupuesto si ese debate no va acompañado de hablar de un pacto de gobierno entre socialistas y posconvergentes.

Un argumento que ha esgrimido también la portavoz de Barcelona en Comú, Janet Sanz: “Estamos dispuestos a que Barcelona tenga un acuerdo de gobierno sólido y estable y presupuestos, porque es lo que la ciudad necesita. Ahora el gobierno vive de la herencia del buen trabajo de las medidas que tomamos en el mandato anterior”.

Hoy vuelve a presentar una propuesta de presupuestos que fracasó en octubre”, ha dicho sobre el anuncio de Collboni la exteniente de alcalde, que ha querido anticipar la posición de su grupo a la espera de qué detalles aporta el gobierno, que, ha dicho, les ha emplazado a reunirse en breve. Pero ha dado a entender que o presupuesto y gobierno o nada. “Lo que necesita la ciudad es un gobierno que pueda tomar medidas y que tenga presupuesto”.

También el PP ha contestado al alcalde. Su jefe de filas, Daniel Sirera, ha calificado de "positivo" que busque pactar las cuentas sin vincularlo a un acuerdo de gobierno con Junts, Barcelona en Comú o ERC, y ha asegurado que si el socialista quiere diálogo es viable. Solo ERC, precisamente el partido que parece más cerca de entrar en el gobierno del PSC, no ha comentado la comparencia de Collboni.

El itinerario

El proyecto de los presupuestos fue presentado el pasado 10 de octubre por el teniente de alcalde de Economía, Hacienda, Promoción Económica y Turismo, Jordi Valls, al igual que el de las ordenanzas fiscqales. Un proyecto de cuentas de 3.735 millones de euros, la cifra más elevada de la historia, con la cifra más elevada también para inversiones: 777 millones.

Los presupuestos y las ordenanzas iniciaron su trámite en comisión el 18 de octubre. La primera etapa fue corta: ese mismo día, las cuentas fueron retiradas del orden del día por parte del Gobierno para no ser derrotadas, en tanto que las ordenanzas sí fueron votadas: todos los grupos de la oposición las rechazaron. 

En capítulos anteriores

Al final, tras varios intentos fallidos, Collboni logró salvar un elemento: la actualización de la ordenanza de terrazas ya iniciado 2024 y con efecto retroactivo, algo inédito. Para ello, para evitar un gran aumento de la tasa de terrazas, contó con el apoyo de Junts per Barcelona.

Collboni afirmó en verano que primero quería negociar las cuentas y luego la posible entrada de socios en su gobierno. Luego acabó desistiendo y anunció en el pleno del 27 de octubre que estaba dispuesto a hablar de los dos temas a la vez. El 28 de diciembre firmó la prórroga presupuestaria, un trámite obligado, que no definitivo, al no ser aprobadas.

Desde entonces, se diría que el debate sobre el socio o socios potenciales de gobierno del PSC ha pasado por encima del de las cuentas, y ha cobrado fuerza la opción de un pacto de gobierno con ERC.

El primer mandato de Colau

Si Collboni solo logra el sí de los republicanos, y por lo tanto no alcanza la mayoría absoluta, tendrá que recurrir a la cuestion de confianza o a una prórroga. En el caso de Colau, tras prorrogar las cuentas de 2016, recurrió a cuestiones de confianza en 2017 y 2018 y prorrogó los últimos del mandato, los de 2019.