Barcelona paga con retraso su deuda con la Trinitat Vella y empieza 53 pisos para realojar a vecinos

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha acudido este miércoles a Trinitat Vella para asistir a la colocación de la primera piedra de una promoción de 53 pisos en el número 48 de la calle Pare Pérez del Pulgar que se enmarca en la reforma que llega a este barrio de Sant Andreu con un retraso de más de 20 años. En concreto, la parte afectada por esa remodelación que ha tardado décadas en iniciarse es conocida como Trinitat Nord, el entorno de la cárcel de la Trinitat.

Las proyectadas son 53 viviendas que según la programación estarán acabadas el segundo trimestre de 2026, con un presupuesto de 12 millones de euros, y que están previstas para el realojo de vecinos de edificios de la acera de enfrente en la misma calle del Pare Pérez del Pulgar.

En total, 129 pisos deben dedicarse a ese objetivo: los 53 anunciados, 41 que estarán a final de 2024 y 35 que no tienen fecha de inicio, ya que están pendientes de que desparezca del mapa la cárcel, que a estas alturas ya debía estar cerrada y demolida. Pero también en eso ha habido retraso. La previsión es que el centro penitenciario cierre en 2025, ha recordado el alcalde de Barcelona, que ha elogiado la vinculación del barrio “con las reivindicaciones vecinales y las de los trabajadores”.

La queja vecinal

“No se han cumplido los plazos en ningún momento. Y esto (por los pisos que se construirán) es el resultado de no dejarlo estar, de lo pesados que hemos sido”, ha proclamado en el acto Manoli Martínez, presidenta de la Asociación de Vecino de Trinitat Vella.

La operación de reforma del entorno de la cárcel se concretó con el acuerdo entre el consistorio y la Generalitat que permitió cerrar la cárcel Modelo, y por el cual el Gobierno catalán recibió parcelas en la Zona Franca para trasladar las prisiones de Wad Ras y Trinitat.

La de los 53 pisos es la segunda promoción que se inicia con el objetivo de realojar a los vecinos que residen en la otra acera de la calle del Pare Pérez del Pulgar, como atestigua la ropa tendida en los inmuebles maltrechos. La primera, que consta de 41 pisos, se empezó a construir en octubre de 2022, con un presupuesto de 8 millones, y estará acabada en el cuarto trimestre de este año. De la tercera, como se ha dicho, no hay todavía calendario.

500 pisos

El recuento de los retrasos que ha sufrido Trinitat Nord resulta penoso. Más allá de que todo esto tenía que haberse hecho más de 20 años antes, las 41 viviendas que se empezaron en octubre de 2022 debían iniciarse a finales de 2019, según anunció en febrero de ese año la entonces alcaldesa, Ada Colau. A su vez, en su momento se afirmó que las obras para hacer las 53 casas de las que Collboni ha colocado este miércoles se anunciaron para finales de 2022.

En 2019, Colau anunció que en total se harían 500 pisos en la reforma de Trinitat Nord, incluidos los 129 para el realojo de vecinos. Los 370 restantes, según se anunció en 2019, se destinarán a alquiler asequible.

Pisos de 58 a 89 metros

Los 53 pisos contarán con un patio interior que será una gran plaza pública u habrá cuatro vestíbulos de cuatro escaleras con números distintos de pisos, por que el terreno obliga a ello. Las escaleras A y B tendrán planta baja y cinco pisos; la C, cinco, irá del primer piso al quinto, y la D, tres, de la tercera a la quinta.

40 viviendas tendrán tres habitaciones y entre 74 y 79 metros cuadrados; nueve tendrán dos habitaciones y entre 58 y 66 metros cuadrados, y cuatro contarán con cuatro habitaciones y entre 81 y 89 metros cuadrados.