Barcelona estudiará implantar la justicia restaurativa para víctimas y agresores de violencia machista

El Ayuntamiento de Barcelona estudiará implantar la justicia restaurativa en casos de violencia machista. Se trata de un proceso en que, tal como lo define la Generalitat, se benefician “tanto la víctima como la parte denunciada: la primera porque puede sentirse escuchada y recuperar su tranquilidad; la segunda, porque tiene la oportunidad de reparar el daño”. La proposición, presentada por Barcelona en Comú, ha contado con el apoyo de PSC, Junts, ERC y PP en la comisión municipal de presidencia. Vox ha votado en contra. 

El concejal de Seguridad, Albert Batlle, ha recordado que el marco judicial vigente “declara prohibida la mediación en casos de violencia de género”. “Más allá de la ley, y atendiendo la propuesta de abrir el debate sobre la viabilidad de instaurar la justicia restaurativa, es un aspecto más a valorar en la revisión de la ordenanza de convivencia”, ha avanzado el edil.

La concejal Jess González (Bcomú) ha defendido que la justicia restaurativa “ofrece una vía alternativa a las personas infractoras, también a las víctimas y a la comunidad en un sentido más amplio que la justicia penal”. “Promueve la participación de víctimas y personas responsables en reconocer el mal causado por sus actos y rendir cuentas”, ha alegado. 

La edil de los comunes ha remarcado que, con el mecanismo que el consistorio estudiará introducir, “no se pretende sustituir en ningún caso el proceso judicial, penal ni civil, ni implica una mediación”. “Va más allá, puede combinarse con las respuestas convencionales de la justicia penal y responder mejor a las necesidades de la víctima”, ha resaltado.

Más formación

La proposición de Barcelona en Comú también aboga por garantizar la formación de los agentes de la Guardia Urbana para atender las denuncias en que la violencia machista se ceba con víctimas que padecen situaciones de especial vulnerabilidad. Los comunes han citado a las mujeres sin estancia regularizada en España, las mujeres trans y las prostitutas. Batlle ha señalado que existe un programa de formación continuo referido a casos de violencia de género que se imparte a la policía local de Barcelona.

A su vez, la proposición plantea actualizar el protocolo de actuación en el empadronamiento de menores en casos de violencia machista. “Tenemos que hacer prevalecer el interés superior del menor y la necesaria protección de la víctima”, ha esgrimido González. Batlle ha respondido que “los menores no pueden ser empadronados indivualmente”, sino con “la persona adulta tutora establecida por sentencia”.

Por otro lado, González ha recordado que se acerca el 25 de noviembre, el día internacional por la eliminación de la violencia contra las mujeres. La concejal lo ha explicitado porque, a diferencia de años pasados, es probable que esta vez no todos los partidos del Ayuntamiento se pronuncien juntos para condenar la violencia machista. La entrada de Vox en el Ayuntamiento tras las pasadas elecciones municipales obstaculiza el consenso sin fisuras que se requiere para que prosperen las declaraciones institucionales.

El consistorio está revisando las mayorías que se requieren para aprobarlas. “En el Ayuntamiento tenemos ahora la representación de quienes niegan las violencias machistas. Esperamos que se haga la modificación para que sigamos denunciándolas el 25-N”, ha rogado González.