Lapso entre contratos

Protesta por el cierre temporal de una oficina jurídica para refugiados en Barcelona

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Oficina del Paral·lel donde se ofrece actualmente el asesoramiento sobre asilo, dentro del Servei d'Atenció a Immigrants, Emigrants i Refugiats (SAIER)

Oficina del Paral·lel donde se ofrece actualmente el asesoramiento sobre asilo, dentro del Servei d'Atenció a Immigrants, Emigrants i Refugiats (SAIER) / Manu Mitru

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Los trabajadores de una oficina municipal que atiende a refugiados en Barcelona se han movilizado esta semana contra el cierre temporal de su servicio jurídico este septiembre. Se trata de la unidad de asesoramiento sobre asilo, una de las prestaciones que ofrece el Servicio de Atención a Inmigrantes, Emigrantes y Refugiados (SAIER). Estará inoperativa durante unas pocas semanas, desde la finalización del contrato vigente el 3 de septiembre hasta la entrada en vigor del nuevo en octubre.

Los trabajadores del servicio, que actualmente presta la empresa ACCEM, han lanzado un comunicado a través de las redes sociales y se manifestarán este jueves por la tarde en la plaza Sant Jaume. Rechazan tener que entregar las llaves el viernes y reclaman al gobierno municipal que encuentre un atajo para firmar el nuevo encargo esta misma semana. Recuerdan, además, que en lo que va de 2023 han asesorado a unas 300 personas cada mes y que en 2024 atendieron un total de 4.454.

El consistorio, sin embargo, resalta que la afectación será mínima y que ya tiene casi listo el nuevo contrato para que lo apruebe la próxima comisión de gobierno. “Está previsto que el servicio se retome en octubre”, aseguran fuentes municipales, que subrayan que en ningún caso se prescindirá de esta unidad ni del SAIER en su conjunto. La propuesta de adjudicación también prevé que el servicio lo opere la misma empresa, ACCEM, añaden.

El lapso entre los dos contratos supondrá “recalendarizar la cita” de 35 personas que ya tenían hora concertada para septiembre, precisa el Ayuntamiento. Las nuevas peticiones de visita “no urgentes” se programarán para octubre y las que sean “urgentes” –el consistorio estima que unas cuatro al mes– las “atenderá y resolverá” el Colegio de Abogados, que también gestiona un servicio complementario del SAIER.