La foto de Laporta y el consejo de mi amigo Maxenchs

Andá pallá Bobo by Emilio Pérez de Rozas

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Emilio Pérez de Rozas

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Debió ser en 1995 o 96. Seguro, mitad de los noventa. Así que, ya ven, hace casi 30 años. Sí, pongamos unos 30 años. Mi buen amigo, perdón, el amigo de todos, Ricard Maxenchs, me invitó a desayunar en el hotel Princesa Sofía. Nada importante. Quería consultarme una cosa, una gestión, de la que no le pude dar consejo alguno porque todo lo que él había planeado y cómo lo iba a ejecutar era, sencillamente, perfecto, inmaculado.

Fue un (otro) desayuno maravilloso. Ricard llevaba ya un tiempo siendo el timonel de un Barça, que, como todos, siempre ha sido un club complicado, retorcido, a la hora de manejar su comunicación, tanto la institucional como la deportiva, perdón, polideportiva.

Reflexión de amigo

El desayuno (como todos) fue interminable. Afortunadamente. Hablando de sus cosas y, sobre todo, de la representatividad que habían depositado sobre sus hombros, Ricard me dijo algo que no olvidaría en la vida: “Cuando tú entras en el Barça, pasas a representar al Barça. Como los jugadores llevan el escudo sobre el pecho, justo en el corazón, nosotros lo llevamos, a veces invisible, en el bolsillo de nuestra americana. Y, por descontado, has de saber lo que eso supone, qué puedes hacer y qué no puedes hacer, qué puedes decir y qué no puedes decir”.

He visto, como todos, la foto del presidente Joan Laporta en la fiesta de bienvenida que ofreció el Barça en Los Ángeles. Y pensé, de inmediato, en Ricard Maxenchs. El abogado Joan Laporta Estruch puede hacer y decir lo que quiera, dónde quiera y cómo quiera. El presidente del Fútbol Club Barcelona, aunque Laporta crea que sí, no puede hacer, ni decir, ni comportarse como quiera.

Joan Laporta, la noche del pasado jueves en Los Ángeles.

Joan Laporta, la noche del pasado jueves en Los Ángeles. / EL PERIÓDICO

Es verdad, es cierto, es transparente y muy palpable que, en los tiempos que corren, con la afición anestesiada y, al parecer, alejada, no solo del Camp Nou sino también de Montjuïc y no digamos ya del día a día, de la gestión, de la gobernanza, la foto en cuestión habrá provocado más risas, memes y hasta aplausos, que críticas, así que puede que siga siendo una opinión de hereje.

Desde luego, lo que sí demuestra esa imagen es que el presidente y todo su séquito siguen encantados de haberse conocido y, en ningún momento, se les ha pasado por la cabeza que esa no es, digo, la imagen que mejor representa al Barça, a la 'gent blaugrana', ni, por descontado, el retrato de lo que es el 'mès que un club'.

Hay quien asegura que se pasa el día alejando a Laporta del carro de los postres, mejor harían alejándolo de según que fotos

Pero cuando digo que todo el séquito debe estar contentísimo con esa foto (“bueno, ya sabéis como es Jan, muy de la fiesta y el buen rollete”), pienso en quien ha pregonado estar todo el día pendiente del presidente, ese que, cuenta, se pasa la jornada alejándole de las Coca-Colas y los carritos de los postres.

No me cabe duda, es más, lo sé de buena fuente, me lo han contado ellos mismos, los inquilinos del ‘camarote’, que a Laporta no hay quien le tosa y que todo, todo, pasa por sus manos. Es evidente que nadie se atreve a sugerirle nada, pues es posible que, si la sugerencia no es de su agrado, al día siguiente deje de pertenecer al séquito.

Esos catalanes...

Muchos pensarán que la imagen exterior del FCBarcelona (y no me refiero solo a Catalunya y/o España) es Xavi Hernández y sus chicos. ¡Ni hablar! La imagen del Barça, lamentablemente y como explicaba Maxenchs cargado de lógica, razón y sentido común, es, fundamentalmente, su presidente.

Hace ya mucho tiempo que los catalanes y no digamos los socios del Barça, adormecidos (bueno, no todos, no todos), han convertido determinados comportamientos, frases e imágenes del presidente, no de Joan Laporta Estruch, que, insisto, puede hacer lo que le pida el cuerpo, en disparatados memes o intercambios de washaps, olvidando que detrás de esa burla va el Barça y, pegadito al Barça, Catalunya.

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