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REAL SOCIEDAD - FC BARCELONA (0-1)

El Barcelona sobrevive en Anoeta gracias a Ter Stegen

Marcos López

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El pie de Ter Stegen. El pie izquierdo y la mano de Ter Stegen. En un heroico ejercicio de sufrimiento, el Barça se mantuvo en el segundo puesto gracias a una victoria obrera, sin brillantez alguna, sostenido sobre ese soberbio portero que le dio tres puntos y algo mucho más trascendente.

Le dio tranquilidad tras dos derrotas consecutivas y le permite, además, a Xavi detener la hemorragia generada por el Eintracht y el Cádiz, aunque le tocara padecer una tormentosa noche, repleta de sufrimiento y tensión, mientras le iban cayendo defensas (Araujo, Alves y Piqué) por lesión dejando sin red a los azulgranas.

Videocomentario de Marcos López: Partido Real Sociedad - FC Barcelona

Pero en la cornisa emergió primero el pie izquierdo de Ter Stegen y después su providencial mano derecha, unido, es justo recordarlo, a una Real Sociedad que le arrinconó en su área. Pero disparó tan mal que podría estar dos noches jugando sin enfocar bien.

Alta velocidad

El partido empezó a tal velocidad que no había tiempo para pestañear. Miles de aficionados llenaban el antiguo Anoeta, ahora el Rea Arena. Y mucho más a través de la televisión, incapaces de despistarse de las pantallas porque la Real, un equipo valiente, imaginativo, ordenado y, sobre todo, interesante, sometió al Barça de Xavi a un estrés nada más iniciarse el encuentro.

Gerard Piqué

Gerard Piqué / VALENTI ENRICH

Habían pasado solo tres minutos, pero daba la sensación de que se llevaba media hora de juego. Aunque los azulgranas, tras un par de despistes y pérdidas absurdas de balón, se recompusieron agarrados al talento de su trío ofensivo de ataque: Dembélé, Aubameyang y Ferran Torres.

El francés insinuó con una galopada vertical por la derecha, mientras el valenciano, que abandonó su rol en el costado izquierdo, aparecía por sorpresa como segundo delantero centro para asistir al gabonés en el 0-1. Todo ocurría en apenas 11 minutos. Aunque, en realidad, se puede reducir y condensar todo en apenas 10 segundos. Del disparo de Dembélé al palo derecho de Remiro al gol de ‘Auba’ transcurrió tan breve lapso de tiempo, sin olvidar que esa doble jugada que sirvió de prólogo para que el Barça tomara ventaja en el marcador nació en Gavi. Un joven astuto.

Ganó un duelo aéreo previo al disparo de Dembélé, que repelió la madera. Un joven listo que le birló la pelota a la despistada defensa de la Real para otear el desmarque previo de Ferran, quien fue el verdadero asistente del gol y así constará en las estadísticas. Pero la propiedad intelectual de ese necesario tanto para el Barça pertenece a Gavi, obligado a asumir más responsabilidades aún por la lesión de Pedri, que se ha despedido prácticamente de la temporada. Tenía mucho peso en el partido, al igual que Frenkie de Jong.

Innovación táctica

Un partido donde un despiste era un pasaporte para el sufrimiento. Y la innovación táctica de Xavi -defendía su equipo con línea de tres formada por Araujo, Piqué y Jordi Alba- quedó supeditada por haber empotrado a Alves en el centro del campo.

Ter Stegen

Ter Stegen / VALENTI ENRICH

Pero la noche le pasó por encima al brasileño, transformado en interior diestro, olvidada ya su vieja función de lateral. En menos de un minuto regaló Alves dos balones a la Real, que pusieron a prueba el corazón del técnico azulgrana, orgulloso del compromiso defensivos que exhibieron sus centrales titulares: Piqué, que acabó la primera parte después de notar molestias en varios momentos, y Araujo.

Solo se despistaron en el último suspiro de eso 45 minutos iniciales cuando Isak demostró que su puntería estaba realmente extraviada. Disparó con el tobillo derecho y con desatino para alivio de Ter Stegen, mientras el Barça le demostraba a Xavi que tenía “deseo y fe” llevando la presión a la Real al límite.

No fue un partido académico. Ni siquiera brillante. Pero había alma y pasión en cada jugada. Lo del Cádiz era pasado. O debía ser, según exigió el técnico. Concluida la primera mitad, el balón fue más de la Real (54% de posesión) que del Barcelona (46%). Pero generó mucho más el equipo de Xavi, sostenido, quién se lo iba a decir, sobre esa columna defensiva que inyectaban el orgullo de Piqué y la garra de Araujo.

Defensa coja

Todo se enredó nada más comenzar la segunda parte porque Araujo acabó lesionado, al igual que Jordi Alba. Iban cojos los dos. Como le sucedió también a Piqué. Se convirtió el Barça en un hospital de campaña, incapaz de entender lo que ocurría, incapaz de entender lo que necesitaba hacer. La Real le había quitado la pelota de manera tan escandalosa que no pasó del centro del campo, sobreviviendo gracias al punto de mira totalmente desviado de Isak primero y de Sorloth.

El noruego desperdició dos ocasiones clarísimas, topando en una con el pie izquierdo de Ter Stegen, que se transformó en portero de balonmano con una intervención providencial. Llena de inteligencia para acortarle los espacios al delantero de la Real y con la firmeza necesaria para no doblar su cuerpo antes de tiempo.

El Barça, mientras, seguía contra las cuerdas. Sin balón, sin personalidad, con sus cuatro defensas titulares castigados por las molestias y sintiéndose, de nuevo, irreconocible porque la Real lo arrolló con fútbol, pero sin remate en un partido donde Xavi perdió a tres de sus defensas titulares. Y la noche se hacía interminable con 10 minutos de tiempo añadido. O sea, 100 minutos en Anoeta para tortura azulgrana que iba achicando balones desde todos los rincones del área. Aquí ya no había libro de estilo alguno. Valía todo para sostener un triunfo que era un gran tesoro.

FICHA DEL PARTIDO

Real Sociedad: Remiro (5), Zaldúa (4), Zubeldía (5), Le Normand (5), Diego Rico (6), Zubimendi (6), Rafinha (4) Merino (6), Januzaj (5), Sorloth (4) e Isak (4).

Entrenador: Imanol Alguacil (5)

Cambios: Gorosabel (s.c) por Zaldúa (m. 81); Guridi (s.c.), Rafinha (m. 81); Ander Martin (s.c. ) por Januzaj (m. 86); Portu (s.c.) por Isak (m. 86): Guevara (s.c.) por Zubimendi (m. 90 + 3).

Barça: Ter Stegen (9), Alves (4), Araujo (6), Piqué (7), Jordi Alba (5), Gavi (6), Busquets (7), Frenkie de Jong (6), Dembélé (5), Aubameyang (7) y Ferran Torres (4).

Entrenador: Xavi Hernández (5)

Cambios: Eric Garcia (5) por Araujo (m. 54); Dest (6) por Alves (m. 65); Lenglet (s.c.) por Piqué (m. 82); Luuk de Jong (s.c.) por Aubameyang (m. 82)

Goles: 0-1, Aubameyang (m. 11)

Árbitro: Del Cerro Grande ( ), madrileño.

Tarjetas amarillas: Araujo (m. 33); Gavi (m. 85), Le Normand (m. 90+2)

Estadio: Reale Arena de San Sebastián.

Espectadores: 35.128

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