¿Por qué el Barça se plantea jugar en el Johan Cruyff?

¿Qué busca el club con el 'Espai Barça'?

"Es un proyecto fundamental para la viabilidad del futuro", sostiene Laporta, recordando que el Barça "va tarde" con respecto a los clubs con los que compite. El Atlético tiene un estadio nuevo. El Madrid ya juega en el nuevo Bernabéu y en el Camp Nou no hay ni rastro de modernidad.

"El nuevo estadio es un generador de ingresos espectacular. Llevará nombre para sacar el máximo de ingresos posibles", proclamó el dirigente, indicando, además, que "el Espai Barça puede tener un impacto para la ciudad como tuvieron en su día los Juegos Olímpicos de Barcelona. Nos convertiremos en una referencia mundial de ocio, con un estadio futurista, moderno y sostenible".

¿Por qué el Estadio Johan Cruyff?

Es la opción doméstica, idéntica a la que empleó el Madrid cuando levantaba el Bernabéu y jugaba en la ciudad deportiva de Valdebebas durante la época de la pandemia. De esta manera, el Barça se ahorra los casi 20 millones de euros que le podría pedir el Ayuntamiento de Barcelona por la cesión del Estadio Olímpico de Montjuïc, donde también debería hacer reformas en un campo que no es suyo.

En la campaña electoral, Laporta defendía la vía del Estadio Olímpico, pero ahora ha verbalizado que "la opción de ir al Estadi Johan Cruyff como la más viable".

¿Cual será el nuevo aforo del Johan Cruyff?

Aumentar el aforo del Johan Cruyff, que es ahora de 6.000 espectadores, a casi 50.000, aunque luego Laporta precisó que la cifra final podría estar en torno a las 40.000 personas. Lo tendría que hacer con una estructura provisional de graderío, obligando incluso a levantar la actual cubierta del estadio donde juegan el Barça B y el Barça femenino, equipos con los que se compartiría el uso del campo. "Será una virguería, pero una virguería segura", pregonó Laporta.

¿Cuánto tiempo durará la mudanza?

Un año duraría el traslado. "Durante una temporada el Camp Nou estará cerrado para hacer la cubierta y montarla", anunció el presidente. El Bernabéu, por ejemplo, estuvo cerrado desde marzo del 2020 a septiembre del 2021. Las obras estarán activas paralelamente a la actividad deportiva salvo en ese periodo para garantizar la seguridad de los espectadores. 

¿Cómo afectará a los abonados?

No todos los abonados (más de 80.000 socios) podrán acudir a los partidos por la menor capacidad del recinto, por lo el club planea, como dijo Laporta, "hacer una rotación". Considera la directiva del Barça que es mucho mejor cerrar el nuevo Camp Nou durante un año para agilizar al máximo las obras y no cohabitar durante dos o tres temporadas como se había pensado en el proyecto de Bartomeu. "Los socios entenderán perfectamente la situación", dijo el presidente.

¿Qué dificultades habrá en el traslado?

Se trata de una obra compleja porque requiere, además, la aprobación del ayuntamiento de Sant Joan Despí, obligando a instalar unas gradas supletorias para 40.000 personas en una parcela de 26.811 metros cuadrados que reúne también el problema, como admitió Laporta, "de la movilidad y el aparcamiento". Más que la obra arquitectónica en sí.

Los problemas de acceso se deben a que no hay muchas vías de transporte público de manera directa y cercana. El TramBaix, que acaba precisamente junto a la ciudad deportiva del club azulgrana, es la más rápida. Además, la instalación tan solo tiene actualmente 700 plazas de párking y al hecho de que ocupa una superficie limitada por la ciudad deportiva y edificios residenciales.

¿Cuándo empezarán las obras del nuevo Camp Nou?

En el verano del 2022 si todos los trámites no sufren ningún inconveniente burocrático. Laporta recordó que el proyecto de Bartomeu, cuyo coste inicial era de 600 millones y luego de 825, "quedó obsoleto, por lo que han introducido mejoras" para convertir el nuevo estadio "en la joya arquitectónica del próximo siglo". Los retoques no afectan sustancialmente a la estética del estadio tal como fue diseñado por los arquitectos.

¿Cuándo se acabarán?

"La idea es que duren tres años. Quizá, cuatro", avanzó Laporta, quien ya ha visto las maquetas del nuevo templo azulgrana. "A mí se me puso la gallina de piel cuando me lo presentaron», dijo el presidente usando un término de Cruyff. En los planes iniciales de Bartomeu, el estadio debería haberse estrenado este año. Sigue en pie. Como el Palau. Solo se ha derribado el Miniestadi.

¿Cómo se financiarán las obras?

Los cálculos de la junta estiman que remodelar el Camp Nou costará entre 800 y 900 millones y el Palau Blaugrana más de 300, más la edificación de todo el campus de las actuales instalaciones en Barcelona y Sant Joan Despí. El plan es pedir a la Asamblea que dé permiso para solicitar un crédito de 1.500 millones. Es el cuarto punto del orden del día.

“Intentaré convencer a los socios”, dijo Laporta. ¿Cómo? El Espai Barça es una necesidad económica y deportiva, “fundamental para el futuro del club” y la junta conservará intacto el control y la toma de decisiones, expondrá. “El inversor no será ningún contrapoder”, garantiza el presidente, “confían en nosotros”.

¿Cómo se pagará el crédito?

El préstamo no se devolverá hasta que los trabajos hayan culminados y las instalaciones “comiencen a generar ingresos” y solo una parte de esos beneficios serán el inversor. Goldman Sachs ya conoce el proyecto y es una de las entidades que podría aportar estos 1.500 millones.

Laporta apuntó que hay conversaciones con otros inversores interesados. El aumento del aforo del estadio (de 98.000 a 110.000 personas) y la venta de palcos privados, junto con la ampliación del Palau y su uso en todo tipo de espectáculos generará ese plus de ingresos. El Barça quiere que las instalaciones funcionen los 365 días del año.