LA SITUACIÓN AZULGRANA

Emerson y la larga sombra de Alves

El lateral brasileño, cedido por el Barça en el Betis, quiere hacer la pretemporada como azulgrana para aspirar al carril que busca inquilino desde la marcha de su compatriota

Emerson Royal.

Emerson Royal. / AFP

Roger Pascual

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Ya hace casi cinco años que Dani Alves hizo las maletas, pero el Barça sigue sin haber podido llenar el hueco que dejó en el lateral derecho. Ni Douglas, ni Montoya, ni Semedo, ni Aleix Vidal, ni Sergi Roberto ni Wagué ni, de momento, Dest han conseguido hacer olvidar al brasileño. Emerson, cedido por el Barça en el Betis, sueña con poder ser el heredero de su compatriota y compartir vestuario con los jugadores a los que se enfrentará este domingo.

En enero del 2019, el Barça pagó 12 millones a Atlético Mineiro para hacerse con los servicios de este prometedor zaguero. Lo cedió al Betis, que se comprometió a pagar 6 millones más la ficha por la cesión por dos temporadas. Expirado este préstamo, en verano pasará a la disciplina azulgrana. El Betis se lo podría quedar en propiedad si paga 6 millones más, aunque ambos clubs se repartirían el dinero en caso de traspaso.

Desde el entorno del jugador, que acaba de cumplir los 22 años, explican que Emerson disputará sí o sí la pretemporada como azulgrana, donde tiene garantizados dos temporadas más de contrato en las que cobraría 2,6 y 3,4 millones de euros, respectivamente. Saben que en el momento en que se enfunde la casaca barcelonista su valor de mercado subirá. El lateral, hasta ahora representado por la agencia Promoesport, ha fichado recientemente por Traffic. Apuntan que el PSG se ha interesado por él, aunque no ha presentado oferta formal. Una opción que el internacional brasileño no vería con malos ojos, ante la posibilidad de jugar en el conjunto francés junto a sus compatriotas Neymar, Rafinha y Marquinhos. Pero su sueño sigue siendo triunfar en el Barça. Y, aunque con el fichaje de Dest la puerta del Camp Nou parecía cerrarse, al ver que el defensa estadounidense no termina de acoplarse quiere aprovechar la ocasión para intentar demostrar que tiene nivel para quedarse en las disciplina barcelonista.

En el Benito Villamarín ha rendido a un buen nivel, brillando más en ataque que en defensa, aunque ha progresado en este último aspecto. Cuentan de él que es un brasileño atípico, que antes del coronavirus ya prefería quedarse en casa con su hermano que ir a las fiestas que organizaban algunos de sus compañeros. Criado en una favela de Ermelino Matarazzo, al este de Sao Paulo, ha hecho donaciones durante el covid a las familias más desfavorecidas de la humilde barriada en la que se crío. Su futuro será una más de las carpetas pendientes del próximo presidente.