Crisis de Can Bofí Vell

La Síndica insta al 'Gobierno Albiol' a dar una respuesta a los 'sintecho' afectados por el cierre del albergue de Badalona

Ester Giménez-Salinas sostiene que el Ayuntamiento debería haber tenido preparada una alternativa al momento del cierre del equipamiento

Personas sin hogar dormirán ante el Ayuntamiento de Badalona en protesta por el cierre de Can Bofí Vell: "Albiol no ha hecho nada"

La Síndica, Ester Giménez-Salinas, y el adjunto a la Síndica, Jordi Sànchez, tras reunirse con los antiguos usuarios del albergue Can Bofí Vell de Badalona

La Síndica, Ester Giménez-Salinas, y el adjunto a la Síndica, Jordi Sànchez, tras reunirse con los antiguos usuarios del albergue Can Bofí Vell de Badalona / EL PERIÓDICO

Gerardo Santos

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La Síndica de Greuges de Catalunya, Esther Giménez-Salinas, ha instado al Ayuntamiento de Badalona a que dé una solución a los más de cuarenta usuarios del albergue de Can Bofí Vell, que desde su cierre el pasado 29 de abril pasan las noches en la calle. "El Ayuntamiento está obligado", remarca la síndica. Giménez-Salinas dice que el consistorio "va tarde" en este asunto y ha remarcado que se debería haber tenido preparada una alternativa en el momento del final del servicio: "Si se cierra el albergue, hay que dar una respuesta a la gente que estaba ahí, y esa respuesta no puede ser que sigan en la calle".

Las declaraciones de Giménez-Salinas, que ha asegurado estar "impactada" tras conocer de primera mano la situación de los antiguos usuarios del albergue, se han producido tras reunirse con su homólogo badalonés y con las propias personas afectadas. Sin embargo, no ha habido reunión con el alcalde, Xavier Garcia Albiol. Se da el hecho que durante la tarde del lunes desde la Sindicatura se anunció la reunión con Albiol. Aun así, fuentes municipales aseguran que nunca se llegó a confirmar el encuentro, de manera que ambas partes han acabado apelando a problemas de agenda: "Yo espero poder hablar con él, la verdad", ha declarado la Síndica.

Una vez se pueda producir la reunión, Giménez-Salinas ha apuntado que le preguntarán al Gobierno municipal qué plan tienen para estas personas. "La ley marca que cuando un riesgo grave, y con carácter transitorio, el Ayuntamiento en este caso está obligado a prestar el servicio". La Síndica ha recordado que abrió una actuación de oficio al respecto del cierre del albergue, a la que se unió una queja emitida por los usuarios del centro. Para que la Sindicatura pueda emitir la resolución pertinente ha de recibir respuesta oficial por parte del Ayuntamiento. Algo que según ha explicitado Giménez-Salinas aún no ha pasado y que "no se puede retrasar demasiado". "Se están vulnerando unos principios legales", ha remachado.

La teniente de Alcalde de Protección a las Personas del consistorio badalonés, Rosa del Amo, ha querido trasladar su "respeto" a las personas que pasan las noches frente a la plaza de la Vila y ha insistido en que se ha llegado a esta situación tras el impago a la cooperativa Suara, que daba el servicio en el albergue. La deuda ascendía ya a los 1,7 millones de euros, recuerda Del Amo: "La única factura que se le pagó fue en octubre de 2021, de 600.000 euros". Es decir, durante el anterior mandato del actual alcalde Albiol.

La edil popular insiste en que el consistorio no dispone de recursos habitacionales y que tampoco las demás administraciones han ofrecido ayuda, mientras que "todas las personas que estaban en Can Bofí Vell siguen teniendo el acompañamiento y el asesoramiento legal del área de Serveis Socials del Ayuntamiento". Así, Del Amo explica que se está trabajando para encontrar una salida "pronto", aunque avisa de que "no es fácil".

Del Amo también ha reincidido en el futuro anuncio por parte del consistorio de la puesta en marcha de un nuevo servicio municipal similar al de Can Bofí Vell que abriría a partir de 2025. Ese equipamiento, según el consistorio explicó a este medio, dispondría de 26 habitaciones para emergencias habitacionales en un edificio donde también se construirán 24 pisos de vivienda de protección oficial". En cualquier caso, el servicio no será "permanente" y se establecerá un límite de estancia, que podría ser de seis meses, a diferencia de lo que pasaba en el antiguo albergue.