rock

Bunbury asalta dos noches el Liceu con su 'Hellville de luxe'

Bunbury, en una imagen promocional de Hellville de luxe.

Bunbury, en una imagen promocional de Hellville de luxe.

NANDO CRUZ
BARCELONA

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Enrique Bunbury se convertirá este fin de semana en el primer rockero español que actúa tres noches en el Gran Teatre del Liceu. Lo hizo por primera vez el 30 de noviembre del 2006 en un concierto compartido con el cantautor asturiano Nacho Vegas y repite esta noche y mañana con dos actuaciones; apenas quedan 500 entradas a la venta para hoy y 200 para el sábado. El liceístico doblete marcará un punto álgido en la segunda etapa de la gira española de presentación del último álbum del aragonés,Hellville de luxe(2008).

Bunbury regresa a Barcelona después de estrenar este disco el año pasado en un Palau Sant Jordi a medio llenar. Fue el 11 de octubre, cuatro días después de la edición del disco. Eran momentos aciagos para el músico. Una macabra paradoja convirtió el lanzamiento deHellville de luxeen una pesadilla. De repente, Bunbury aparecía en todos los informativos acusado de plagiar al poeta Pedro Casariego. Ante tal panorama, defendió su postura, canceló la promoción de un disco herido por la polémica, cumplió con la decena de actuaciones previstas en España y se marchó a hacer las Américas.

MÉXICO LINDO Y FOGOSO / En Estados Unidos y, especialmente, en su México querido, le esperaban 17 conciertos, 250.000 espectadores, recibimientos más fervorosos, noches más excitantes y titulares más inflamados y apetecibles. Aunque también allí han surgido voces que ponían en duda el interés de su actual espectáculo: «La música de Bunbury y grupo no ha avanzado, se ha estancado y comienza a fusilarse a sí mismo», denunciaban enLa Jornada. En esta gira, el zaragozano maneja un repertorio de 50 canciones de las que cada noche escoge unas 25 y que en ningún caso incluyen títulos de su etapa con Héroes del Silencio.

Desde que disolvió aquel grupo, Bunbury ha ampliado al máximo sus registros estilísticos, pasando de la electrónica al cabaret y de las cadencias latinas al rock norteamericano, asumiendo cada grabación y gira como una oportunidad de aprender y crecer que no quería desperdiciar. De mismo modo, no ha dudado en aliarse con artistas tan dispares como Nacho Vegas, Adrià Puntí, JLF y, más recientemente, el grupo madrileño Le Punk o la mexicana Ely Guerra. Tanto puedes verlo participando en un disco de homenaje a Miguel Ríos como componiendo canciones para Raphael.

DEFENSOR DE ZARAGOZA / El más joven y esquivo de esa hermandad del rock español que completan los caballeros Loquillo, Jaime Urrutia y Andrés Calamaro sigue nadando contracorriente, jugándose los dos brazos en caso de no poder arriesgar solo uno y forjándose un historial de lo más atípico. ¿Quién más puede recibir una distinción como la medalla al «Defensor de Zaragoza» (en el ámbito de la cultura, cabe puntualizar) y generar una avalancha de peticiones para que enMuchachada nuile dediquen una de sus imitaciones?

Fue allí donde un falso Bunbury se preguntaba: «¿Cuántos Enrique Bunbury hay?». Él mismo respondía: «Está el niño tímido, la estrella del rock salvaje, el artista controvertido, el muchachito maño, el follador, el monógamo, el pedantón, el de bofetada, el poeta, el intelectual...».

BunburyLiceu • Vie 26 y sab 27 • 21.00 • De 64 a 90 €