A Scott Disick le gustan que no le quepan en la boca

Todo ser humano que se precie tiene sus aficiones, unas más locas que otras, pero en su mayoría respetables. Mientras algunos se dejan el sueldo en joyas o en construir maquetas de barcos, lo de Scott Disick va de viajes y, de paso, besos, no solo a Sofia Richie sino a aviones. Así tal cual.

El padre de los hijos de Kourtney Kardashian (38) tiene un hobbie de lo más rarito. Porque eso de ir por la vida dando besos a los aviones, bueno, un poco extraño sí que es. Vale que te lleva a todos lados en nada de tiempo y hay que mimarlo porque como se estropee la hemos liado. Pero de ahí a darle un beso...

Además que no se esconde. De hecho Sofia Richie ha sido testigo del beso digno de un Oscar. Y claro, si estás presenciando tal muestra de amor y encima tienes un móvil a mano hay que hacer foto para inmortalizar tan romántica estampa. Verás donde se va a quedar la risa como no se lave para darle un beso a ella.

Sofia, cuidadito que te cambian por un avión en minuto y medio y te quedas sin churri. Bueno, aunque a juzgar la cantidad de viajes que han hecho estos dos desde que están juntos lo mismo deja lo del avión como cariños esporádicos.

Parece que la mejor manera de calmar un poco todas las broncas que se trae con Kourtney es coger y darse una escapada donde surja para desconectar de todo. Bien pensado porque últimamente Scott está como el perro del hortelano con Kourtney, que ni come ni deja comer.

Lo de besar aviones no lo terminamos de ver, pero eso de los viajes como que sí... Ojalá un avión nos quiera y nos lleve a tantos sitios como el de Scott Disick y Sofia Richie hace con ellos. Eso sí, lo de los cariñitos ya lo dejamos para otro día (si eso).