A Kourtney Kardashian es Travis Barker (de Blink 182) quien le marca el ritmo

Para los que piensan que Khloé Kardashian (34) es el 'patito feo' del grupo, he aquí una prueba de que la mayor de las hermanas liga más que Mario Casas en su mejor época (antes de entregarle el 'cuore' a Blanca Suárez, vamos). Pero no nos liemos, porque lo que te queremos contar es el nuevo chuleo de Kourtney con Travis Barker, el batería de Blink 182.

Por si tus conocimientos sobre el clan Kardashian están a un nivel de principiante, te hacemos un cortísimo resumen de lo que viene siendo la vida sentimental de esta chica desde que se separó de Scott Disick, el padre de sus tres hijos. Kourtney y Scott estuvieron juntos desde 2005 hasta 2015, pero a lo largo de los 11 años de relación hubo muchísimas (demasiadas) idas y venidas. Desde que ha vuelto a la soltería, Kourtney lleva varios años buscando un nuevo amor, y hasta parecía que lo había encontrado junto al exboxeador de origen argelino Younes Bendjima. Duraron un año, pero la cosa no fue a más. Una pena, porque el chico estaba muy bien, la verdad.

Después de Younes, hubo varios rumores, pero ninguno con la fuerza del que ahora te contamos. El afortunado se llama Travis Barker, toca la batería, y forma parte del grupo Blink 182. Lo suyo es el punk rock con toques pop, y juzgar por la cantidad de tatuajes que tiene en los brazos, este chico es todo menos convencional. ¿Qué les pasa a las Kardashian que siempre se enamoran de músicos o jugadores de baloncesto?

A lo que íbamos, que Kourtney se nos ha 'enamorao', y que su nuevo churri se llama Travis. Aunque si eres seguidora del 'reality show' de las Kardashian, sabrás que Travis no es un desconocido del clan (ni de Rita Ora, ya que estamos). Es más, vive muy cerca de Kourtney (en alguna ocasión ha salido en el programa). El músico y la mayor de las Kardashian-Jenner son amigos desde hace años (ya sabes, el roce hace el cariño). Tiene 43 añitos (ella tiene 39) y dos hijos, fruto de una relación anterior, y ha sobrevivido a un accidente de avión. Queremos verlos juntos, por supuesto.