Kanye West es un malote hasta para besar

El marido de Kim Kardashian (36) es particular (como el patio de tu casa). Eso es algo que ya sabíamos. Y sí, estamos hablando de Kanye West (40). Resulta que el rapero es de los duros de pelar. De esos que ni un golpe en el dedo meñique del pie les puede hacer soltar una lágrima.

Pues espérate y no corras que también hemos descubierto que es de los que besan con los ojos abiertos. A ver, que no pasa nada, pero normalmente la gente pues como que los cierra porque es más cómodo y como que así lo disfruta más.

Pero ojito (nunca mejor dicho) porque no estamos hablando de un beso subidito de tono con su mujer, sino de uno muy cariñoso a su pequeña North West. En una fotografía donde se ve a la pequeña con cara de "ay que a gustito estoy aquí', su padre le planta un beso en la mejilla con los ojos más abiertos que un supermercado 24 horas.

Kim se deshace de amor con la instantánea y escribe: "Quiero decir... ¡qué bonito!". A ver, querida, que sí que es muy chula la fotografía, pero que la próxima vez Kanye cierre los ojos que da un pelín de repelús.