Iker Casillas también necesita ánimos: lo está pasando muy 'regu' con el ingreso de Sara Carbonero

La recaída de Sara Carbonero (37) ha sido un jarro de agua fría para ella y su familia. Aunque sabemos que la operación a la que tuvo que someterse tras ingresar el día 5 de febrero en la Clínica Universidad de Navarra de Madrid fue todo un éxito, los ánimos en su entorno están un poco bajitos y no es para menos. Sara y toda su familia están sufriendo mucho desde que le diagnosticaron cáncer de ovarios allá por 2019.

Los médicos dicen que "están muy contentos con el resultado, algo que ha tranquilizado y celebrado toda la familia", pero no quita que la preocupación por la periodista siga ahí. Es lo más normal del mundo y a cualquiera de nosotras nos pasaría.

En una situación tan complicada es importante contar con el cariño de los tuyos y eso Iker Casillas (39) lo sabe bien, por eso no se ha separado de su mujer en ningún momento más que para llevar a los peques, Martín y Lucas, al cole. Después le hemos visto llegar al hospital con cara de estar regulín, y es que todo esto le tiene que estar sacando de sus casillas nunca mejor dicho.

Junto a Iker se encuentran en el hospital la madre y la hermana de Sara, además de algunos amigos que van llegando con cuentagotas para ayudar al portero en esta situación tan delicada. De hecho, la revista Semana lleva unas fotos de Iker abrazando a estos amigos, otras cabizbajo y pensativo... ¡Todo nuestro ánimo!

"Iker está hecho polvo", cuentan fuentes cercanas al futbolista. Y para muestra esas imágenes.

Además, Iker dedicó una bonita foto a Sara por su 37 cumpleaños, un post donde animaba a su mujer a seguir "bailando hasta el final".

Estamos seguros de que todo volverá a la normalidad muy pronto. ¡Animo, familia!