La boda de Risto y Laura Escanes: traicionados en Instagram
Las normas están para saltárselas ¿no?
Risto Mejide y Laura Escanes ya se han casado, por si no lo sabías.
La boda del año estuvo bajo muchos controles de seguridad para que no le reventaran la exclusiva a los novios.
Pero claro, si invitas a 450 personas es imposible controlar los 'stories' de todos.
Y así ha sido, a base de 'stories' se han saltado todas las restricciones de la boda de Laura y Risto, vestido incluido. Que aunque ya se puede ver en Hola, los invitados se encargaron de enseñar antes de tiempo.
Algunos se iban al baño a sacarse la foto de grupo.
Otros ni cortos ni perezosos subían detalles de la celebración, como el menú o la decoración de las mesas.
El centro de todas las incógnitas eran los vestidos que la novia luciría el día del enlace, en concreto dos, de Rosa Clará. Incógnitas despejadas por los 'stories' de los allí presentes.
Esta boda no era una boda normal, tampoco los regalitos que dieron a los invitados. Unas fragancias creadas por cada uno de los novios, olores que les inspiraban a su pareja. Pero la cosa no quedó ahí.
Sí, ellos mismos diseñaron el perfume.
Sí, ellos mismos diseñaron el perfume.
Unas bailarinas para que ningún invitado se paseara descalzo por la boda con dolor de pies, un buen paquete de chuches con lápiz con letra incluido, fotos del fotomatón... no faltaba ni un perejil.
Lo más sorprendente fueron dos pintalabios de una firma muy conocida, que no son precisamente baratos.
¿Dónde quedaron los alfileres de flores de miga de pan?
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