La foto de la ficha policial de Justin Timberlake desvela en el (mal) estado que conducía

Justin Timberlake ya se encuentra en libertad tras ser arrestado el lunes 17 de junio por la madrugada en Nueva York tras una noche de fiesta en el American Hotel. Justin Timberlake se enfrenta a un cargo por conducir bajo los efectos del alcohol, aunque él le aseguró al agente que le detuvo que sólo había bebido una copa.

Según los documentos vistos por PEOPLE, el artista explicó que "se había tomado un martini y luego se había marchado para seguir a sus amigos a casa". El mismo informe detalla que el cantante se saltó una señal de stop y que no conducía en el lado derecho de la calzada.

El agente que procedió a la detención observó que Timberlake tenía "los ojos inyectados en sangre y vidriosos, su aliento desprendía un fuerte olor a bebida alcohólica, era incapaz de prestar atención, hablaba con lentitud, se movía con inestabilidad y no superó todas las pruebas de sobriedad estandarizadas".

Tras ser trasladado a comisaría, se leyó el resumen de los hechos que había realizado el policía hasta en tres ocasiones y él dejó claro que se negaba a someterse a una prueba de alcoholemia química. Esa descripción encaja con el aspecto que presenta en la fotografía que se le tomó para la ficha policial, donde aparece con una camisa negra sobre una camiseta gris, peinado y con un semblante serio, pero no alarmado.

Justin Timberlake ha sido acusada de un cargo por conducir en estado de embriaguez. También ha recibido dos citaciones: una por saltarse una señal de stop y otra por no mantenerse en el carril. El marido de Jessica Biel ha sido puesto en libertad tras pasar la noche detenido a la espera de la lectura de cargos, deberá comparecer de nuevo ante el tribunal el 26 de julio.

Humillado por mayor: el policía que detuvo a Justin no lo reconoció

Uno de los detalles más sorprendentes de la detención fue que el policía que lo arrestó, un hombre joven recién incorporado al cuerpo, no reconoció a Justin. Para que tú veas que puedes ser el ganador de varios Grammy, llenar estadios o haber provocado un cisma en tu país (dejando fatal a Janet Jackson en la Superbowl) y aun así puedes ser medianamente anónimo.

Esta situación provocó un momento incómodo y quizás cómico si no fuera por la seriedad de la situación. Según cuentan, Justin, aunque se comportó durante el tiempo que permaneció detenido (toda la madrugada del lunes al martes), murmuró mientras le ponían las esposas: "Esto va a arruinar la gira mundial".

Tras su arresto, Justin fue trasladado a la comisaría, donde estuvo varias horas bajo custodia. De comisaría salió con un aspecto totalmente cambiado: colores neutros, zapatillas de deporte y toda la imagen de una estrella mundial en un día cualquiera. Varios amigos del cantante, que estaban presentes en la fiesta, intentaron interceder a su favor, pero no consiguieron salvarlo: de hecho, el incidente fue grabado por las cámaras corporales de los agentes, añadiendo una capa de transparencia a la actuación policial.