Olivia Munn tiene ya legado para su hijo de dos años: su proceso contra el cáncer

Olivia Munn ha tenido que someterse a cuatro operaciones en el transcurso de un año como consecuencia del cáncer "agresivo" que le fue diagnosticado, según reveló el mes de marzo. De forma más concreta, la actriz se ha enfrentado, en cuestión de meses, a una doble mastectomía, así como una histerectomía y una ooforectomía con las que le extirparon el pecho, el útero y los ovarios.

Ahora ha contado que su decisión de documentar exhaustivamente todo este proceso pretendía fundamentalmente que su proceso no quedara en el olvido, teniendo en cuenta que su hijo, Malcom, solo tiene dos años.

"Si no lo conseguía, habría querido que mi hijo supiera, siendo más mayor, que había luchado para estar aquí. Que había hecho todo lo posible", ha contado en el programa 'Good Morning America', de la cadena estadounidense ABC. Olivia ha contado también en este espacio que está "agotada" debido a la fuerte medicación que recibe. "Pero sé que debo mantenerme agresiva. Sé que lo voy a lograr y no voy a parar", explica.

En medio de su calvario médico, la actriz volvió a pasar por el quirófano una vez más para una extracción de óvulos. De esta forma, tanto ella como su marido, el cómico John Mulaney, sueñan con una nueva incursión en la paternidad: "John y yo hemos hablado mucho de ello. Nos dimos cuenta de que no queríamos dejar de crecer como familia", ha indicado sobre un procedimiento finalmente exitoso, pero no exento de riesgos.

"Fue un proceso aterrador, porque tengo un cáncer que se alimenta de las hormonas, así que sabía que era arriesgado", señala. Cuando su médico le informó de que contaban con "dos embriones sanos", Olivia y John rompieron a llorar de emoción. "De verdad esperamos que funcione y que podamos tener otro bebé. Solo queremos uno más. No voy a pedirle mucho más a la vida, lo prometo. Solo queremos un bebé más", se ha sincerado.

Famosas que han Inspirado en la lucha contra el cáncer

En un mundo donde las famosas a menudo se presentan como intocables, algunas han compartido sus procesos, recordándonos que la fama y la vulnerabilidad no son mutuamente excluyentes. Su forma de presentar sus enfermedades públicamente a menudo supone un rayo de esperanza para todos aquellos que enfrentan batallas similares, recordándonos que nunca estamos solos en nuestras luchas.

Una de ellas fue Angelina Jolie quien, en su decisión de someterse a una doble mastectomía preventiva en 2013, tras conocer su alto riesgo genético de cáncer de mama, inspiró a mujeres de todo el mundo a tomar el control de su salud y hacerse las pruebas pertinentes.

Otro caso es el de Shannen Doherty: la estrella de 'Beverly Hills, 90210' ha compartido abiertamente su historia con el cáncer de mama desde su diagnóstico en 2015. Su historia es la del apoyo emocional durante la enfermedad.

Unos años antes, vivimos la enfermedad de Kylie Minogue: la reconocida cantante enfrentó el cáncer de mama en 2005, un desafío que la llevó a una cirugía y tratamientos intensivos. Desde entonces, ha sido una voz destacada en la concienciación sobre la detección temprana y el cuidado personal, demostrando que incluso las estrellas más brillantes enfrentan momentos oscuros.