Laura Pausini no ha venido a El Hormiguero divertirse, sino a llorar

Laura Pausini tiene una de esas voces melancólicas, será por el tono de sus canciones o por su dulce presencia que nos hace soñar cada vez que la vemos en la pantalla. La cosa es que ayer protagonizó junto con Pablo Motos uno de los programas más tiernos y emotivos que ha tenido el programa de El Hormiguero hasta la fecha, la cantante más que a divertirse fue a llorar al plató de A3.

El presentador tenía una súper sorpresa para la cantante, utilizó la magia para contar en directo la historia de la vida de Laura Pausini, una historia llena de viajes entre Italia y España, llena de emociones que tocaron la fibra sensible de la cantante y que acabó provocando un mar de lágrimas llenas de recuerdos e ilusión.

En el libro se podían ver los lugares en los que Laura creció rodeada de su familia y de la música, desde pequeñita tuvo claro que se quería dedicar a este arte que era y sigue siendo su pasión. Recuerdos con imágenes en movimiento, como cuando ganó el Festival de San Remo, cuando se convirtió en una gran cantante conocida o cuando ganó su primer Grammy.

Normalmente el plató de El Hormiguero suele ser un espectáculo de risas, entretenimiento, bromas y mucho cachondeo, pero tal y como lo describió la cantante, su presencia lo convirtió en: 'un Hormiguero llorón', con mucha ternura.

Al final del programa, cuando ya nos habíamos calmado todos y ya habíamos secado nuestras lágrimas, un giro inesperado en el guion de la vida de Pablo Motos nos puso muy tristes y es que la mamá del presentador falleció ese mismo día y, lo más bonito que pudo hacer fue dedicarle el programa a 'La Amelia', a quien recordaremos para siempre por su colaboración en El Hormiguero 3.0.

Entre lágrimas y abrazos de la invitada de la noche, Pablo Motos despidió el programa: 'Para ella' decía entre sollozos y casi sin poder contener la emoción. Una pérdida que será difícil de superar para el presentador.