Olga Moreno se hunde por un bote de cacao... Y se acuerda de Rocío Carrasco

La mujer de Antonio David Flores ha caído en desgracia.

@Supervivientes

A ver cómo te lo explicamos: Olga Moreno llegó a 'Supervivientes 2021' con todas las papeletas para ser una de las primeras expulsadas. El documental de Rocío Carrasco (44) hizo que su marido perdiera el trabajo en Mediaset, y Olga se transformó de la noche a la mañana en una de las personas menos queridas de España. Su saber estar en Honduras hizo que sus compañeros de concurso la respetasen y jamás la nominasen. Hasta ahora, porque el hambre le ha jugado una mala pasada. Olga ha robado comida a su mejor amiga, Melyssa Pinto, y lleva días llorando de arrepentimiento. Resultado: le ha dado por comparar este disgusto con todo el lío que ha dejado fuera, el de Rocío Carrasco.

"Me siento sucia", decía la mujer de Antonio David Flores cuando Jorge Javier le preguntaba por el robo. "Yo no soy así, no soy mala persona, pero este programa te lleva a extremos que no te puedes imaginar", explicaba la concursante.

Moreno ha vuelto a pedirle perdón a Melyssa. Una y otra vez. Lo hizo deshecha en lágrimas, reconociendo por millonésima vez su error. Pero el problema no es Melyssa. El problema es que el robo de Olga hizo que esta cayera en desgracia.

Ya nada es como antes. Ella lo sabe y ha aprovechado el momento para hacer referencia a lo que está pasando fuera: "Entré con mucho dolor, me ha costado trabajo llegar hasta aquí y la he cagado", dijo refiriéndose al documental en el que Rociito acusa a Antonio David de malos tratos.

Olga quiere remontar de cara a la final, pero sabe que no lo tiene fácil. "Llevo una semana muy mal y esta semana no quiero estar así. Quiero reírme y tirar para delante porque no soy mala persona. Pido perdón, no sé qué más hacer. No me puedo fustigar más", ha dicho. Quiere arreglar el desarreglo. Ha pasado de estar a las puertas de la final a estar con un pie fuera del concurso.

El hambre la llevó a una equivocación estratégica tremenda. Los tenía a todos de su parte y ahora no hay ni uno que no le haga el vacío. Y la han nominado, por supuesto. Olga podría volver a España antes de lo que tenía previsto. Todo por un bote de cacao. Ella insiste en que no es mala persona, ¿pero qué opinará el público?