Emily Blunt necesita (urgente) el paraguas de Mary Poppins
Su hija le ha hecho LA pregunta.
Además de ser uno de las caras más reconocibles del momento al ser el relevo de Julie Andrewsy convertirse así en la nueva Mary Poppins del siglo XXI, la actriz británica Emily Blunt, también ha tenido que resolver estos días algunos de los 'problemillas' relacionados con el papel de la niñera mágica.
Estos han afectado principalmente a su hija. "Mi hija mayor me preguntó hace unos días que si de verdad podía volar. Por desgracia, le tuve que decir que no, y ahora me temo que seguiré siendo una madre decepcionante para ellas en la vida real", eran unas palabras entre bromas, pero reales, de la esposa de John Krasinski, con quien tiene a la Hazel de 4 años y a Violet de 2, en la llegada a la alfombra roja del Royal Albert Hall, en el que tuvo lugar el estreno de 'Mary Poppins Returns'.
Pese al pequeño malentendido que haya podido crear entre ella y su hija mayor, Emily no podía sentirse más agradecida y entusiasmada por la oportunidad que ha tenido de dar vida a un personaje tan legendario y de gran peso en el imaginario colectivo, a pesar de que en un principio la idea de tener que afrontar semejante responsabilidad le resultaba algo "intimidante". Y no es para menos, porque la actriz tiene miedo a las alturas.
"Cuando me dieron el papel me sentí algo intimidada ante el territorio tan delicado en el que me iba a adentrar. Pero una vez que me deshice de la presión y las inseguridades, disfruté muchísimo interpretándola y he de decir que la adoro. Estamos hablando de un personaje extraordinario, pero en realidad me lo preparé exactamente igual que lo he hecho con otros personajes".
Bueno, la verdad es que aunque no pueda enseñarle a su hija si puede cumplir ese deseo también en la vida real, nosotros nos conformamos con la magia del cine...