LA REGULACIÓN DE LA CIRCULACIÓN

El director de Tráfico advierte a Mas de que si suprime la 'zona 80' habrá más accidentes

Navarro abre la puerta a implantar peajes en algunas carreteras para sufragar su mantenimiento

PATRICIA MARTÍN / Madrid

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

"Ojo con suprimir drásticamente el límite porque va a haber más accidentes y alguien tendrá que asumir la responsabilidad". Esta es la advertencia que el director general de Tráfico (DGT), Pere Navarro, ha lanzado al presidente de la Generalitat, Artur Mas, sobre su compromiso de revisar el límite de 80 kilómetros por hora en los accesos a Barcelona.

Navarro ha admitido que toda medida "se puede revisar o flexibilizar", pero se ha mostrado totalmente en contra de "suprimir el límite radicalmente".

El director de la DGT ha lanzado esta advertencia en la Tribuna RACC, organizada por el club automovilístico en Madrid. El director de la Fundación RACC, Miquel Nadal, le ha recordado que conducir a 80 kilómetros por hora en vías de gran capacidad "crea una tensión y un desajuste" en los conductores, especialmente en aquellos que llevan turismos y están obligados a circular a la misma velocidad que los camiones.

La respuesta de Navarro ha sido que considera "razonable" que se reduzca la velocidad al entrar en una ciudad, pero ha reconocido que "es bueno que la carretera te diga a qué velocidad puedes ir" con un estrechamiento de los carriles y no solo con una señal vertical.

La Generalitat ha anunciado que este mes tomará una decisión sobre el mantenimiento, la flexibilización o la eliminación de la limitación en los accesos a Barcelona.

Nueva vía de financiación

Por otra parte, el director de la DGT ha abierto la puerta a estudiar la implantación de peajes de coste económico reducido para mantener el buen estado de la red de carreteras, al igual que ha hecho Portugal en ciertas autovías. Navarro considera que "las grandes carreteras" ya están construidas, por eso en su opinión ahora toca "mejorar su gestión y mantenimiento". Si la crisis impide dicha conservación, ha añadido, "se podría estudiar" la implantación de peajes, buscando la fórmula de que pague más quien más utilice la infraestructura.

Por último, Navarro se ha mostrado preocupado por los accidentes entre los mayores de 65 años, el único colectivo en el que han subido las víctimas mortales en la última década. Además, como el envejecimiento de la población conllevará un aumento de personas mayores al volante, ha abogado por "repensar la señalización" y llevar a cabo nuevas medidas que faciliten la conducción a este colectivo de automovilistas.