Aventureros, bienvenidos a La Pedrera

En <strong>La Pedrera</strong> de Gaudí, uno de los edificios modernistas más emblemáticos de Barcelona, las chimeneas son guerreros, las escaleras copian los entresijos de una concha de caracol y la buhardilla recuerda el esqueleto de una ballena. En realidad, solo hace falta un plus de magia para acabar de convertir este monumento en una pequeña aventura a los ojos de un niño. Y este es precisamente el plan que proponen, todos los sábados por la mañana, los talleres y visitas dinamizadas para familias.

La Pedrera, también conocida como Casa Milà, es uno de esos lugares de Barcelona que merecen el esfuerzo de ser visitados al menos una vez en la vida. Las familias que elijan precisamente este sábado, 28 de enero, podrán hacerlo a través del taller 'Hace cien años, La Pedrera', pensado para niños de 5 a 13 años acompañados de un adulto.

Al entrar, los participantes formarán equipos y se convertirán en alguno de los personajes que frecuentaban el edificio hace un siglo: burgueses exquisitamente vestidos, criadas con cofia, bigotudos pintores o quizá chóferes (la Casa Milà fue el primer edificio de Barcelona con aparcamiento propio para carruajes y los primeros automóviles). Los niños irán recibiendo las prendas que les ayudarán a asumir su identidad cada vez que resuelvan alguna de las pistas que se esconden en diferentes rincones del edificio.

Cada sábado hay un taller distinto. 'Indiana Stones: ¡Exploremos!', que se llevará a cabo el 4 de febrero, es una visita dinamizada en la que los expedicionarios deben resolver los retos que plantea el carnet que reciben al inicio. El taller plástico 'Una sopa de piedras', otra de las propuestas (el 11 de febrero), invita a descubrir la casa y las relaciones de sus antiguos habitantes a través de la representación de un cuento, con marionetas confeccionadas por los propios niños.

Entre prueba y prueba, la visita a uno de los antiguos apartamentos de La Pedrera permite descubrir, por ejemplo, qué juguetes podían encontrarse en la habitación de un niño burgués de hace un siglo, desde el clásico caballo de cartón a la magia óptica del zootropo.

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Lo que cuentan los objetos

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El Born Centre de Cultura i Memòria se abre a las familias con el ciclo '<strong>El Bornet</strong>', que ofrece actividades para los más pequeños. Los primeros domingos de mes, la música es la protagonista (la próxima cita es el día 5 con Samfaina de Colors), y todos los fines de semana hay talleres en el recinto. Mañana, los niños pueden convertirse en investigadores y descubrir qué nos cuentan unos objetos de hace 300 años con una misteriosa historia.