Medidas de protección

Padres franceses, contra la mascarilla en la escuela

El Consejo de Estado descarta la petición de familiares de abolir la norma que obliga a usar la mascarilla entre estudiantes de seis años o más 

El colectivo de padres sopesa recurrir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos al estimar que no existe una separación de poderes

Un sanitario somete a un test PCR a una mujer en París.

Un sanitario somete a un test PCR a una mujer en París. / periodico

Irene Casado Sánchez

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Desde el pasado 2 de noviembre, el uso de la mascarilla en las escuelas de Francia es una obligación para todos los niños y niñas a partir de los seis años. La norma, decretada durante la segunda ola de coronavirus, está lejos de conseguir la unanimidad entre los padres. Organizadas en diferentes colectivos dispersos por todo el territorio francés, cientos de familias contestan una normativa que consideran "injustificada" y "nociva" para los pequeños. El Consejo de Estado rechazó este lunes su recurso contra dicho gesto barrera. Lejos de dar su brazo a torcer, las familias están dispuestas a llevar la cuestión hasta el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

"En el estado actual de los conocimientos científicos y habida cuenta de la circulación todavía muy intensa del virus [...] la obligación de los niños de 6 a 10 años de edad de llevar mascarilla en la escuela y en las actividades de ocio extraescolares no constituye una vulneración grave y manifiestamente ilícita de las libertades fundamentales de los niños". Con esta observación, la máxima jurisdicción administrativa de Francia dio carpetazo a la solicitud del colectivo "Question-Masques-Enfants 49" sobre la abolición de la norma.

Aunque perdió la batalla ante el Consejo de Estado, la asociación, que reúne a 183 padres del departamento Maine-et-Loire, ha conseguido visibilizar varias cuestiones que hasta ahora permanecía en un segundo plano: los eventuales efectos adversos del uso de la mascarilla para los más pequeños y la falta de evidencia científica sobre sus beneficios.

La salud física y mental de los niños

"Dolores de cabeza, ansiedad, sarpullidos, agotamiento, problemas para respirar, angustia", son, según Marion Gros, miembro de un colectivo de padres de la región de Nantes, algunos de los efectos secundarios del uso de la mascarilla "durante ocho horas al día" en las escuelas. "Sin olvidar a los pequeños que utilizan gafas y terminan quitándoselas porque con el vaho no pueden ver el encerado, ni tampoco las numerosas veces que tocan la mascarilla con las manos, ni las trabas en el proceso de sociabilización", continúa.

En un manifiesto publicado el 15 de diciembre de 2020, el Colectivo de Profesionales de Salud Especializados en Pediatría enumera múltiples riesgos relacionados con el uso de la mascarilla en la infancia: trastornos del humor y del comportamiento, trastornos por déficit de atención y problemas de aprendizaje, así como trastornos psicosomáticos, dificultades para conciliar el sueño o la pérdida del apetito.

Frente a las preocupaciones sobre la salud física y mental de los niños, el Consejo de Estado señala en su decisión que "no hay ninguna contraindicación médica general relacionada con el uso de la mascarilla en niños mayores de tres años".  "Ni la OMS, ni UNICEF, ni la Sociedad Francesa de Pediatría han informado de tales riesgos", argumenta el tribunal antes de evocar la variante británica del virus que “aumenta de manera significativa tanto la transmisibilidad como la susceptibilidad a la infección en los niños”.

La variante británica

"Recurrir a la variante británica es la guinda del pastel", lanza indignada Marion Gros al otro lado del teléfono, "con este argumento pueden tratar de justificar cualquier medida, pero varios médicos británicos han confirmado que esta cepa no es más peligrosa para los menores".

En efecto, la variante británica no provocaría "casos más graves", pero si "parece más contagiosa" entre los niños, aseguró este mismo jueves el ministro de Sanidad, Oliver Véran, antes de anunciar un nuevo protocolo destinado a realizar hasta un millón de pruebas mensuales entre los más pequeños y sus maestros. "Realizaremos pruebas de detección [incluidos] niños de seis años, dondequiera que tenga sentido", enfatizó.

Con los niños en el punto de mira, "la cuestión va más allá del conflicto entre quienes aprueban o desaprueban el uso de las mascarillas", estima Marion Gros, madre de dos pequeños de 5 y 8 años. "Es indispensable hacer un balance entre los riesgos y los beneficios: ¿Es mejor evitar que un niño pueda convertirse, aunque es poco probable, en vector del virus, o protegerle de los efectos a largo plazo del uso de la mascarilla durante su infancia?", se interroga.

Una administración "ciega y sorda" a las protestas ciudadanas

La cuestión no es menor, al colectivo "Question-Masques-Enfants 49" se suman muchos otros, englobados en su mayoría en la asociación Enfance & Libértes que cuenta con más de 40.000 adherentes: "padres 'ordinarios' preocupados por la rápida degradación de las condiciones de escolarización de nuestros hijos a lo largo de los últimos meses". "Somos conscientes de la situación sanitaria. Sin embargo, nos preocupa la dinámica actual que deteriora excesivamente nuestra vida cotidiana, amenazando la salud de nuestros hijos y las libertades individuales fundamentales", escriben en su página web.

Tras la decisión del Consejo de Estado dando el visto bueno a las disposiciones gubernamentales sobre la controvertida cuestión, los miembros del colectivo "Question-Masques-Enfants 49" sopesan recurrir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos para "denunciar la ausencia de independencia entre el poder ejecutivo y los jueces administrativos", explica su abogado en un comunicado, al considerar que el arbitraje ilustra "la división entre los ciudadanos y una administración que es ciega y sorda a sus protestas".

En las instancias europeas o en las calles a base de manifestaciones y protestas, de una forma u otra, "seguiremos adelante con nuestro combate", asegura Marion Gros, al menos, "hasta que justifiquen con verdaderos argumentos sanitarios esta normativa".

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